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Pero su país sostuvo lo contrario por al menos tres años. Algunos, como el boletín geopolítico GZERO, atribuyeron el súbito cambio al rechazo de Zelenski
00:02 sábado 22 febrero, 2025
ColaboradoresEstados Unidos está, o al menos parecen estar, en el centro de un extraordinario cambio en su política exterior, al grado que hoy parecen abandonar a los que fueron sus aliados. El cambio fue simbolizado por un brutal viraje de 180 grados en cuanto la guerra en Ucrania, que en la nueva narrativa pasó de ser un país invadido por un dictador expansionista a una nación provocadora de la guerra en que se encuentra y su presidente, Volodímir Zelenski, a ser el dictador responsable de la tragedia.
Pero su país sostuvo lo contrario por al menos tres años. Algunos, como el boletín geopolítico GZERO, atribuyeron el súbito cambio al rechazo de Zelenski a aceptar un trato ofrecido por el gobierno del presidente Donald Trump, que pondría la mitad al menos de los recursos minerales y naturales ucranianos en manos de una empresa estadounidense especialmente creada como pago por la ayuda militar que les dió el gobierno del presidente Joe Biden.
Eso subrayaría lo que muchos definen como el carácter transaccional de las ideas de Trump, pero la ubicarían también en el arco de un consecuencial rejuego geopolítico. Para otros se trata ciertamente de un cambio de paradigmas y de acuerdo con algunas explicaciones favorables a la perspectiva del gobierno Trump, es parte de un cambio en la realidad mundial.De acuerdo con esa formulación, la actuación rusa en Ucrania demostró que es una amenaza mucho menor que lo que se creía y, por tanto, que los europeos pueden defenderse de una Rusia, que como China, enfrenta limitaciones debidas a problemas internos, sociales o económicos.
Las políticas internacionales del gobierno de Trump introdujeron incertidumbre respecto al futuro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la relación con una Europa dividida ahora por el ascenso de ideologías de derecha, alentadas esta vez por los propios estadounidenses.
De acuerdo con un análisis, el gobierno de Trump desea en realidad que Europa asuma un papel mayor en su defensa en vez de dejar que sea Estados Unidos y siga a cargo de ella. Para la empresa Geopolitical Futures, por ejemplo, esa liberación de recursos les permitiría concentrarse en la cuenca del Pacífico y especialmente lograr una mayor concertación de seguridad entre países que como Australia, Japón, Corea del Sur, Taiwán y Filipinas carecen de los marcos de coordinación que tienen los europeos.
La realidad es que nadie está seguro de cuál sea la explicación correcta y tal vez todas ellas, y algunas más, lo sean. Después de todo, es una etapa de transición en la que nadie tiene certidumbre absoluta de nada y hacia dónde se dirige el mundo. Lo que se cree es que surgen nuevos centros de poder y los ya existentes, como Estados Unidos y Rusia, tratan de fortalecer sus posiciones geopolíticas y consolidar a como dé lugar sus zonas de influencia. Lo cierto es que hoy la geopolítica se hace sentir más que nunca desde el siglo XIX, pero a mayor escala.
POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS
COLABORADOR
@CARRENOJOSE