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Los inconformes consideran que el mandatario se ha negado a avanzar en las investigaciones por corrupción
21:00 domingo 18 noviembre, 2018
MundoPuerto Príncipe, Haití.- Al menos seis personas murieron este domingo y otras cinco resultaron heridas de bala, entre ellas un agente, durante protestas multitudinarias registradas en diferentes localidades de Haití para exigir que se enjuicie a los responsables del presunto desvío de fondos del programa Petrocaribe, informó la Policía. Grupos opositores, como la coalición Sector Democrático y Popular, también convocaron las manifestaciones para pedir la renuncia del Presidente Jovenel Moïse, quien hizo un llamado al diálogo. Los inconformes consideran que el Mandatario se ha negado a avanzar en las investigaciones por corrupción. La Policía informó en su balance preliminar que seis personas murieron, al menos una por un disparo de arma de fuego, en diferentes localidades, y anunció que este lunes presentará su informe definitivo. Con pancartas en las que reclamaban que se indague el paradero de unos 3 mil 800 millones de dólares de Petrocaribe (un programa mediante el cual Venezuela financia el suministro de crudo a Haití), miles de personas marcharon frente al Palacio Nacional en Puerto Príncipe, se dirigieron a la sede del Parlamento y recorrieron el barrio de Delmas, donde se les unieron más manifestantes. Los inconformes bloquearon varias calles con basura y neumáticos en llamas que emitieron humo negro, el cual cubrió gran parte de Puerto Príncipe durante la tarde. La mayoría de los negocios permanecieron cerrados y el transporte colectivo dejó de operar. Según una investigación del Senado, al menos 14 ex funcionarios estuvieron vinculados al desvío de los fondos durante el Gobierno del ex Presidente Michel Martelly (2011-2016), y ninguno ha sido procesado judicialmente. Mediante Petrocaribe, desde 2005 Venezuela ofrece a países de la región el suministro de crudo a precios bajos, con créditos blandos y facilidades financieras a 25 años con dos de gracia. En Delmas, algunos manifestantes incendiaron un vehículo de la Policía, mientras que en la localidad de San Marcos, 70 kilómetros al noroeste, cuatro personas resultaron heridas y decenas fueron detenidas. Ante las protestas, el Mandatario haitiano canceló el viaje que tenía previsto con su gabinete en la ciudad de Cabo Haitiano para conmemorar el 215 aniversario de la batalla de Vertieres, la cual marcó la victoria de Haití para independizarse de Francia a principios del siglo XIX y acabar con el Gobierno colonial esclavista. El Presidente depositó una ofrenda floral en el panteón nacional de la capital y difundió un mensaje por radio y televisión para exhortar a la unidad y el diálogo. "La batalla terminó. Hoy es tiempo de unirnos para romper las cadenas del subdesarrollo y la miseria", señaló el jefe de estado, quien consideró que las cadenas del subdesarrollo están caracterizadas por el espíritu antidemocrático que busca crear inestabilidad y más miseria.
El ex senador Moïse Jean-Charles, quien encabeza las protestas en Cabo Haitiano, a 130 kilómetros de la capital, también pidió la renuncia del Presidente y de su Gobierno por considerar que se han negado a profundizar la investigación. André Michel, uno de los voceros del Sector Democrático y Popular, consideró en conferencia de prensa que sólo hay una opción: el Presidente y el Primer Ministro Jean-Henry Ceant se deben irse del Gobierno. Al insistir en la renuncia del Mandatario, los manifestantes portaban banderas rojinegras a fin de recordar el estandarte usado por el líder independentista Jean-Jacques Dessalines en su lucha contra los franceses. En una de las jornadas de protestas más recientes, manifestantes lanzaron piedras contra agentes policiales cuando Moïse, que llegó a la Presidencia en febrero del 2017 como abanderado del partido de Martelly, depositaba el 17 de octubre una ofrenda floral en el monumento a Dessalines en su aniversario luctuoso. De forma previa, los violentos disturbios registrados durante protestas contra el intento del Gobierno por aumentar los precios de los combustibles a principios de julio dejaron decenas de comercios saqueados y destruidos, y obligaron al entonces Premier Jack Guy Lafontant a renunciar con todo su gabinete. -- EXCÉLSIOR