Max Verstappen no pudo completar la Q3 del Gran Premio de Singapur de la F1, luego de escuchar “¡boxes! ¡boxes!”, lo que ocasionó que el holandés finalizara en la octava posición. El campeón del mundo reveló que fue lo que le molestó. No hemos podido terminar la vuelta porque no hubiéramos tenido suficiente combustible en el auto, fue un error que no vimos venir durante toda la sesión. Iba por una buena vuelta cuando aborté antes de comenzar la última vuelta, podría haber sido la pole”, declaró Verstappen. El actual campeón del mundo vislumbró una carrera frustrante porque no hay muchas oportunidades de rebasar y “veremos qué podemos hacer mañana”. En este tenor, Christian Horner, jefe de Red Bull, aseguró que cuando Max llegó a la vuelta rápida, el combustible estaba demasiado cerca del límite. “En lugar de comenzar desde el pit lane, elegimos abortar la vuelta, lo cual fue una decisión frustrante para Max y para todo el equipo”, indicó. EXCELSIOR