Todos tenemos esa canción que no toleramos ni un segundo,este fue el caso en una cárcel en donde algunas personas demandarán a los empleados por poner tantas veces una misma canción. En la ciudad de Oklahoma, tres personas presentaron una demanda en contra de empleados de la cárcel del condado de Oklahoma porque, según los investigadores, los obligaban a escuchar, esposados, la famosa canción infantil ‘Baby Shark’. ​Estos actos fueron catalogados como actos de tortura. Daniel Hedrick, Joseph Mitchell y John Basco demandaron a los comisarios del condado, al jefe de policía Tommie Johnson III, al fideicomiso de la cárcel y a dos antiguos custodios. En una investigación realizada en 2020 se determinó que al menos cuatro presos fueron sujetados a una pared, con las manos esposadas mientras la canción ‘Baby Shark’ sonaba una y otra vez a un volumen alto durante más de dos horas. Y no ha sido el primer caso en la que se usa esta canción infantil para torturar o para algún fin negativo ya que en West Palm Beach, Florida reprodujeron la canción a alto volumen a las afueras de un centro de eventos para evitar que los vagabundos pasaran ahí la noche. Como resultado de esta investigación y demanda fue que dos ex empleados de la prisión, Gegory Cornell Butler Jr. y Christian Charles Miles, los dos de 21 años de edad, y su supervisor, Christopher Raymond Hendershott, de 50 años, fueron acusados de delitos menores por eventos de crueldad hacia un preso y de conspiración. Recientemente, la canción infantil ‘Baby Shark’ se convirtió en la canción más reproducida en la historia de YouTube, superando a canciones de artistas mundialmente reconocidos. El video oficial acumula un total de nueve mil millones de reproducciones y fue publicada el 17 de junio del año 2016.