Donald Trump hizo este viernes el primer viaje de su segundo mandato a Carolina del Norte, donde ha ganado dos veces, e irá al bastión demócrata de California, dos estados golpeados por catástrofes naturales.

En un discurso pronunciado en Carolina del Norte, donde el año pasado las inundaciones provocadas por el huracán Helene mataron a más de 100 personas en el estado, Trump dijo que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) realmente lo ha "decepcionado".

Trump avanzó que firmará "una orden ejecutiva para comenzar el proceso de reforma y revisión fundamental de la FEMA, o tal vez para deshacerse de ella".

Vamos a recomendar que la FEMA desaparezca", sostuvo.

El mejor presidente

Trump se reunió con las víctimas de las devastadoras inundaciones y les pidió que contaran lo que, según ellas, eran errores de las agencias federales y las compañías de seguros.

El millonario intenta usar el tema de la ayuda para desastres para arremeter contra sus rivales demócratas en California, pese a los incendios forestales que han matado a más de 25 personas, devastado grandes extensiones en el estado y causado miles de millones de dólares en daños.

Dijo que podría retener la ayuda si California no cambia las leyes electorales que, según él, permiten votar a los migrantes en situación irregular, lo cual no es cierto.

Además, estima que el estado podría resolver su sequía simplemente abriendo una válvula, una afirmación desmentida por los expertos.

En California tengo una condición", dijo. "Quiero dos cosas: quiero una identificación de votante para la gente de California (...) y quiero ver que se libere el agua y baje".

"Después de eso, seré el mejor presidente que California haya visto jamás".

El pasado mes de agosto, el presidente, que suele afirmar que el sistema electoral está "amañado" en su contra, opinó que "si Jesús bajara a la Tierra y contara los votos", ganaría en California, afirmó.

En noviembre, la entonces vicepresidenta demócrata Kamala Harris se impuso en el estado, como era de esperar, pero Trump ganó terreno.

Según la prensa, el presidente será recibido a su llegada por el gobernador del estado, Gavin Newsom.

Este demócrata se ha convertido en la diana predilecta del republicano, que ha alterado su apellido para llamarlo "Newscum" ("scum" significa escoria).

También lo llamó "idiota" en una entrevista el miércoles en Fox News.

El gobernador es uno de los principales líderes de la oposición a Trump.

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Tenemos la intención de apoyar a los estados de todo el país para defender nuestra Constitución y defender el estado de derecho", advirtió el día después de la victoria republicana.

Con información de Excélsior