Reforma a la Ley General de Salud, en materia de partería tradicional, aprobada por el Senado de la República, además de complementar la Norma Oficial Mexicana 007 para la atención de la mujer durante el embarazo, parto, puerperio y cuidado del recién nacido, brinda un reconocimiento a la labor de las parteras tradicionales, aseguró la senadora Geovanna Bañuelos. Al fundamentar a favor del dictamen, la coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo señaló que las modificaciones aprobadas obligan a las autoridades sanitarias a establecer las acciones para respetar, garantizar y proteger el ejercicio de las parteras tradicionales en condiciones de dignidad y acorde con los métodos y prácticas curativas, así como el uso de sus recursos bioculturales. “Para lo anterior, se le habrán de brindar los apoyos necesarios sin condicionamientos, sin certificaciones, siendo suficiente el reconocimiento comunitario. Además, se establece que, respecto a los certificados, los que se autoricen para las parteras tradicionales o las que ellas mismas elaboren serán de la mayor sencillez con lenguaje de acuerdo a su cultura e identidad”, detalló. Para la senadora por Zacatecas, la labor que realizan las parteras mexicanas tiene un significado especial, pues su madre, Aurelia de la Torre Vázquez del Mercado, auxilió a cientos de mujeres en el alumbramiento.  “Sirva también como un personal y muy modesto homenaje a mi señora madre, que a los 15 años de edad empezó con estas prácticas allá en nuestra tierra, en el municipio de Monte Escobedo, Zacatecas. Y gracias al cual trajo a este mundo a más de 153 criaturas”, enfatizó. Recordó que el trabajo de las parteras data de tiempos milenarios y es el cúmulo de saberes ancestrales y formas de atención integrada a las mujeres abarcando conocimientos sobre el efecto terapéutico de plantas y otros recursos naturales, además de técnicas corporales para el buen desarrollo del embarazo, parto y posparto. “Como ya mencioné, para nuestro grupo parlamentario es trascendental que se reconozca la labor social de la partería tradicional, el profesionalismo de sus practicantes, sus habilidades y competencias para darle el justo espacio para la atención en salud materna”, señaló Geovanna Bañuelos. Pues dijo, con esta reforma se rinde un homenaje a todas aquellas mujeres que, por la distancia geográfica, por las condiciones económicas o sociales desde hace decenas de años han brindado este servicio y atención a las mujeres que lo necesitan.