Vínculo copiado
#ESNOTICIA
#ESNOTICIA
El centro laboral es el segundo lugar con más casos de acoso y hostigamiento hacia las mujeres
06:03 lunes 20 marzo, 2023
JaliscoEl sector femenino percibe 15 por ciento menos de salario en comparación a los hombres y no tiene muchas posibilidades de ocupar cargos directivos en sus centros laborales, ello de acuerdo a las cifras que maneja el INEGI en el último cuatrimestre del año 2022, además de que el área de trabajo es el segundo lugar con mayor actos de acoso y hostigamiento contra las mujeres, así lo dio a conocer Juan Pablo Martínez, presidente de la Coparmex Puerto Vallarta. “De acuerdo con el INEGI, con datos al cuarto trimestre de 2022, solo el 46.2 por ciento de las mujeres en edad de trabajar lo hacen, mientras que de los hombres, la cifra es del 76.5 por ciento, entre otros puntos, observamos que ellas perciben 15 por ciento menos salario que los hombres, que tienen una menor participación en la formalidad, y el porcentaje en la pobreza laboral es mayor y que existen menos probabilidades de que alcancen posiciones de carácter directivo”. Mencionó que como cámara empresarial se implementó un protocolo para sumar esfuerzos y erradicar el acoso y hostigamiento hacia las mujeres, a fin de contar con espacios seguros. “En México es urgente erradicar las violencias contra las mujeres para construir un país incluyente y con igualdad de oportunidades, tal como proponemos en el Modelo de Desarrollo Inclusivo (MDI). Por ello, para hacer valer sus derechos, desde 2020 se implementó desde Coparmex Nacional un Protocolo de Actuación ante incidencias que cuenta con herramientas y lineamientos para propiciar espacios seguros. En nuestro Centro Empresarial dicho Protocolo funciona desde mediados del año pasado, y el objetivo es coordinar esfuerzos para prevenir, detectar, atender, pero sobre todo erradicar el acoso y hostigamiento en los centros laborales”. Puntualizó que desde Coparmex se impulsa su participación para que tengan mejores empleos; desaparecer la brecha salarial; acelerar la transición de la informalidad a la formalidad; promover que las empresas adopten manuales y políticas para prevenir y sancionar el acoso; así como la implementación de Códigos de Ética donde se privilegien los méritos y la capacidad de todas las personas sin hacer distinciones por cuestión de género.