Zacatecas representó desde nuestra llegada a este gobierno de la Cuarta Transformación, en diciembre de 2018, la gran escuela de cambio en el país, por la historia que tiene detrás la Universidad Autónoma de Zacatecas. Afirmó lo anterior Luciano Concheiro, subsecretario de Educación Superior en el país, al acudir a presenciar el informe de avances del proceso de reforma de la UAZ, que el coordinador general de dicho proceso, Raúl Delgado Wise, presentó este viernes en el foyer del teatro Fernando Calderón. En representación de las autoridades universitarias, estuvieron presentes entre otros, Ángel Román Gutiérrez, Hans Hiram Pacheco García y Agustín Serna Aguilera, secretarios general, académico y administrativo, respectivamente, así como Angélica Colin Mercado, directora de la Unidad Académica Preparatoria. Este proceso de reforma en la UAZ planteó el funcionario federal ante decenas de investigadores, docentes y estudiantes, así como delegadas y delegados de la Comisión de Reforma, “no nos la inventamos nosotros desde el centro”, es decir en la Ciudad de México, como podrían pensar “ante todo, estos envidiosos de los procesos de cambio. No nos la inventamos del centro, sino que, muy por el contrario, del centro venimos a aprender aquí”. “De la federación venimos a inspirarnos en un proceso cuya historia, ha sido determinante, tanto en el sentido de la autonomía, radicalmente distinta a la autonomía universitaria referida en 1929, aunque en algunas que la preceden tienen que ver con amplias movilizaciones estudiantiles, de que este ha sido un movimiento estudiantil inspirador, de la propia autonomía que en Zacatecas es central”. Luciano Concheiro, recordó cómo, en la década de los años 60 del siglo pasado, como estudiante preparatoriano recorrió parte del norte del país, para conocer los procesos de cambio universitarios que se daban en Zacatecas y en Nuevo León, eso le permite hacer un balance general de cómo ha evolucionado históricamente nuestra institución. Un análisis dijo, de cómo se lleva una cultura de corte epistémico, de cómo conocemos las cosas y pone en el centro el corazón mismo de la Universidad Disciplinada y Disciplinaria también, esto como un elemento fundamental.

Este ha sido, dijo, un modelo donde “la interdisciplina representa una ruptura, de corte podríamos decir con la universidad napoleónica, como les gusta decir a los compañeros aquí, pero representa también una búsqueda de una relación radicalmente distinta”. “Primero entre las disciplinas, pero más allá en la humanización del trabajo (porque) los que en general ponen el acento nada más en los métodos de enseñanza, lo que está haciendo, es olvidándose en la estructura misma de la universidad, donde se pueden dar procesos vivos de transformación fundamental”. Además, planteó Luciano Concheiro, “por eso me parece que la reforma universitaria zacatecana es la expresión inequívoca de un profundo cambio, que tiene su base en el compromiso con la sociedad zacatecana, nacional y también binacional”. Actualmente, observó el responsable de la Subsecretaría de Educación Superior de la SEP, “parte de la voluntad colectiva de la UAZ, busca construir los cimientos de –voy a usar esta terminología chiapaneca-, una muy ‘otra universidad posible’, en este sentido, me refiero a una institución que se piensa dentro de la vida de las comunidades, cercana a sus procesos vitales, una universidad que expresa sus procesos a partir de la democracia a partir del cumplimiento comunitario, a partir de su autonomía”. Pero aclaró sobre el concepto de autonomía, “una autonomía responsable para con la sociedad, que le dio forma, para lo cual fue creada. Una universidad que entonces no tiene una epistemología que oriente la organización de las disciplinas en el curriculum universitario, sino también existen y reconocen la existencia, lo más importante, de diversas epistemologías y posibilidades, de plantear diferentes respuestas a un mundo-problema. Reconociendo la diversidad de las formas de pensar, de ser, actuar en el mundo, y se guía en una conciencia transformadora, no contemplativa”. Por ello, señaló Luciano Concheiro, ésta “es una reforma de ruptura, porque es de-colonial, en términos de su propuesta: no solamente enfrenta a la universidad napoleónica, a la universidad disciplinar”. También, advirtió Luciano Concheiro sobre la UAZ: “esta universidad se dice popular, y tiene que estar muy consciente de en qué sentido es popular: no solamente por las casas del estudiante, no solo por el esfuerzo que se hace, sino precisamente por aquellos que participan de ella, por aquellos que en términos digamos, sin distingos de sexo, género, etnia, cultura, capacidad, condición social, capacidad, condición social, económica, migratoria, nacionalidad o religión se sienten excluidos”. La reforma de la UAZ, sostuvo el funcionario mexicano, “coloca a esta universidad, como una institución que se reconstruye así misma, para darle un sentido distinto a la autonomía universitaria, ligada a la transformación social. Entonces esta universidad no se plantea hacia su interior para cambiar, sino que está proyectándose hacia la sociedad zacatecana”. Finalmente, Luciano Concheiro recordó sobre la incorporación de los estudiantes a este proceso -a los integrantes de la Comisión de Reforma de la UAZ-, que “aquí podemos tener toda la voluntad maternal y paternal, para que el movimiento estudiantil se conforme, pero los movimientos estudiantiles no se inventan, los movimientos estudiantiles no son producto de encuestas y de la conciencia o autoconciencia que se tenga, sino son producto también de haber logrado, una visión de conjunto de la universidad”.