En la Gaceta Parlamentaria que contiene el orden del día de la sesión de este 4 de marzo de 2025, la diputada del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, Sara Rocha, presenta una iniciativa de reforma constitucional para:

“Con la intención de que las iniciativas de los ciudadanos del Estado cuenten con mayor representatividad, se pretende armonizar la norma constitucional del Estado con la Federal, a efecto de que estos reúnan un número equivalente, por lo menos, al cero punto trece por ciento de la lista nominal de electores, en los términos que señalen las leyes”.

El discurso de la legisladora es una rotunda mentira. En su exposición de motivos sostiene que esta reforma permitiría “desahogar el trabajo legislativo” porque si los 2,193,785 electores del estado “decidieran hacer uso de la iniciativa al mismo tiempo”, el Congreso “no se daría abasto”. Basar una explicación en una hipótesis imposible es falaz y malintencionado. La diferencia es que nosotros sí vamos a sostener nuestros juicios en datos, señaló en comunicado de prensa Congreso Calificado cuyo presidente es José Mario de la Garza.

En la LXIII Legislatura, luego de tres años de trabajo legislativo, se presentaron un total de 1071 iniciativas y de éstas, solo 113 fueron presentadas por la ciudadanía: 10.5%. Es decir, solo una de cada diez. Por si fuera poco, la legisladora omite que esas iniciativas tienen un tratamiento desigual al que los legisladores dan a sus propias propuestas. De las 1071 iniciativas totales, el Congreso aprobó 524, lo que representa un 49%. En contraste, de las 524 iniciativas aprobadas, solo 18 eran de la ciudadanía, es decir, apenas un 1.6%. del total.

En la LXII Legislatura: lo mismo. 1688 iniciativas presentadas en total y de éstas solo 110 provinieron de ciudadanía: 6.5%. Del total de 1688 iniciativas el Congreso aprobó 749, un porcentaje de 44.3%. Mientras que, de las 749 iniciativas aprobadas, solo 23 tuvieron un origen ciudadano, esto es, un 1.3%.

En resumen:

En San Luis Potosí apenas 1 de cada 10 iniciativas que se presentan tiene su origen en la ciudadanía, pero esas propuestas sufren un trato discriminatorio. Primero, porque se les dictamina en menor cantidad que las de los propios legisladores o de los otros poderes; y segundo, porque son aprobadas en una proporción ínfima, de cada 100 iniciativas que aprueba el Congreso, solo 1 fue presentada por la ciudadanía.

La diputada del PRI Sara Rocha miente y con falsedades busca limitar aún más el derecho constitucional ciudadano de presentar iniciativas de ley.