Sobre el nuevo impuesto ambiental que fue aprobado en el Congreso del Estado para el cobro a aquellos establecimientos que contaminen en gran medida: “hay una buena intención, sin embargo, no tomaron en cuenta una serie de informaciones técnicas, tiene fallas y lo hicieron de la peor manera posible”, expresó en entrevista para Altavox el experto en temas jurídicos, Jorge Chessal. El abogado expresó que una de las principales fallas de la iniciativa es que no explica a detalle qué establecimientos pudieran ser parte de este impuesto y en su caso, pagar el mismo. “Al hablar de establecimiento no están enunciando cuáles son los giros ni las actividades que van a estar grabadas por el impuesto”. En ese sentido, Jorge Chessal aseguró que los diputados locales “no tienen la capacidad de elaborar bien las leyes”. “Los diputados no tienen esa capacidad de elaborar bien las leyes porque si querían cobrarles a ladrilleras, si querían cobrarle a mineras, pues hubieran escrito ladrilleras y mineras, porque si ponen establecimientos, ya entran escuelas, hospitales, un estadio, o hasta las fiestas patronales de una iglesia con fuegos artificiales”. Chessal aseguró que si esta medida continúa prosperando, las empresas tendrían que generar su inspección y verificación de lo que están produciendo y arrojando la atmósfera. También probablemente empezaran a surgir despachos de consultoría que avalen quiénes si cumplen y quiénes no. Finalmente, el abogado aseguró que tras estas medidas y “los vacíos que existen”, se promoverán amparos de empresas, particulares y asociaciones que pudieran ser favorables para estos”. “Creo que se van a promover muchos amparos de las distintas empresas, de los particulares y asociaciones civiles y me parece que con resultados previsiblemente muy favorables porque esta iniciativa en realidad no está cumpliendo la finalidad que buscaría”.