El especialista en seguridad David Saucedo señaló que la detención Antonio Oseguera Cervantes, hermano de Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco es la prueba del cambio “silencioso” en la estrategia de seguridad federal que dejó de ser de abrazos y no balazos. Informó que los recientes ataques contra militares por parte de los grupos delincuenciales, revelan que ahora tienen identificados a oficiales de alto rango como objetivos prioritarios. A decir del analista, se esperaba una reacción más violenta del grupo criminal ante la captura de Antonio Oseguera, sin embargo, se sigue a la expectativa de cuál será la estrategia de reacción del cártel. Explicó que el cártel reacciona de tres maneras ante la detención de uno de sus integrantes y esto puede ser con actos de narco terrorismo, el secuestro de integrantes de las fuerzas armadas o apostarle al sistema judicial corrupto y liberar a los detenidos con argucias legales. David Saucedo no descartó que la detención del hermano del Mencho pueda desatar aún más la violencia no sólo Jalisco y en las zonas limítrofes de Zacatecas, sino también en las siete regiones donde opera el cártel Jalisco Nueva Generación.