A Guillermo Martínez le cambió el mundo en el momento que entregó su vida a Dios. La plenitud la obtuvo a sus 29 años tras vivir un carrusel de emociones en primera y Segunda División.   Hacía las cosas que creía que estaban bien, pero no me daban la oportunidad, sentía que no era lo suficientemente bueno para recibir una oportunidad, en ese proceso apareció mi esposa, mis padres, mis hermanos y Dios. Poner todo en sus manos es lo que me tiene aquí, el día que me entregué completamente a creer, pero no de palabra, sino de sentirlo, mi mundo cambió. Hoy disfruto de lo que más quiero, si tú me hubieras dicho hace cinco años que estaría aquí, no te lo hubiera creído”, mencionó Martínez.  Su poca actividad tras debutar en 2015 con el Pachuca lo llevó a buscar un lugar en el ascenso con Lobos Buap y Coras de Tepic, dos años más tarde cuando apareció Chivas, todo aparentaba cambiar, pero cayó abruptamente en un abismo de cuatro años y tres equipos de segunda (Mineros, Cafetaleros y Celaya) que lo orillaron a pensar en tirar la toalla y olvidar sus sueños en el 2020.  En 2021, su gran oportunidad de competir apareció en Puebla, pero sus 10 goles en el Apertura 2023 lo catapultaron a su primer club grande: Pumas.  Fue una sensación de mucha alegría, Pumas no se piensa dos veces. En mi casa estamos muy contentos de descubrir lo que significa internamente, es una institución gigantesca que a ojos de las personas externas lo notan, pero adentro, hacen que quieras más al club. Es indescriptible lo que Pumas ha hecho en mi, es algo que nunca había vivido”, señaló el goleador de los felinos con seis tantos en la presente campaña. Su motor es su pequeña hija y su esposa, quien en algún momento le dijo una frase que guarda en su corazón para los días más complicados: “Es lo que mereces, está bien que te emociones, pero es lo que tú mereces”.   AMÉRICA, PRIMER CLÁSICO Este sábado, Guillermo Martínez vivirá su primer clásico ante el América y es inevitable no imaginar anotarle un gol a las Águilas.  Vivirlo y disfrutarlo, será una semana especial, se vive diferente. Es un objetivo que se puede plantear (anotar), pero lo importante es ganar el partido, no sirve anotar dos goles y que la victoria no se consiga. Soy una persona que siempre pone encima al grupo de lo individual, si me toca marcar, bienvenido sea, pero lo más importante será defender el escudo de los Pumas”, externó Martínez.   UN PARTIDO NADA MÁS El 16 de diciembre de 2022, México cayó 3-2 ante Colombia en un juego amistoso en Los Ángeles, California. Ese compromiso significó el debut de Guillermo Martínez que arrancó de titular y puso el 2-0 antes de la remontada de los cafetaleros. Pero antes de cumplir ese sueño, recordó cómo anhelaba ese momento sin importar el rival. El día que yo pisé la Selección Nacional descubrí algo nuevo en mí, un sueño acaba de comenzar. Jamás voy a olvidar cómo la gente gritó ese gol, sobre todo por lo que me costó llegar ahí. Le dije a mi esposa: “Quiero ir a la selección un partido, no importa con quien sea, yo quiero ir un partido, con eso me sentiría satisfecho, pero una vez estando ahí, me alimentó el hambre de querer más”. FUENTE: EXCELSIOR