Al menos dos de las obras contempladas dentro del programa Proagua que se trabajan entre la federación, el estado y los municipios, pudieran perderse por problemas con las comunidades donde se pretenden aplicar. 

Susana Rodríguez Márquez, titular de la Secretaría de Agua y Medio Ambiente (SAMA), detalló que de las 40 obras que se tienen programadas, dos no han podido arrancar porque el proceso agrícola ya arrancó y los pobladores no han permitido que se hagan las obras para introducir  ductos de agua.

Aunque se reservó los municipios que presentan estos problemas, dijo que deberán ser los alcaldes quienes resuelvan la situación con los pobladores, porque se tiene hasta noviembre para concluir la ejecución de la obra, sino el estado y el municipio podrían ser sancionados. 

En ambos casos el recurso ya fue dispersado y se ha entregado a las empresas ganadoras de la licitación, pero no han podido arrancar la obra porque las obras pasan por tierras sembradas.

De no llegar a acuerdos, la obra pudiera ser cancelada y los insumos comprados por las empresas reorientados para otras acciones, lo cual “sería lamentable” ya que los proyectos fueron evaluados y aprobados desde principios de año.

Precisó que se tienen 19 acciones programadas y algunas ya tienen un 65% de avance, la mayoría tienen que ver con perforación de pozos y equipamiento, entre los beneficiarios están Juchipila, Ciudad Cuauhtémoc, Fresnillo y la Jiapaz.

Dichas obras se hacen con una inversión tripartita, en la que los ayuntamientos entregan el 30% del costo de la obra y el resto el estado y la federación.