De visita en Glasgow, Escocia, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, adelantó que impondrá un impuesto verde a 160 empresas y 20 pedreras en el estado. Mencionó que el impuesto está dirigido a las empresas que más contaminan por lo que tendrán que pagar y ese dinero servirá para el combate a este problema que acarrea la entidad. "Servirán para incentivarlos a renovar o cambiar sus procesos para hacerse menos contaminantes y librarse del impuesto”, explicó. El gobernador participó en el evento Cities 4 Forests, en donde compartió el panel con Raymond Johansen, Governing Mayor de Oslo y Celia Blauel, vicealcaldesa de París. El jefe del ejecutivo estatal compartió las acciones que está emprendiendo su gobierno para solucionar el tema de la contaminación ambiental. Dijo que con Pemex (Petróleos Mexicanos) se logró un acuerdo para reducir las emisiones de la Refinería de Cadereyta. También planteó el nuevo sistema de movilidad que contempla la compra de 100 unidades eléctricas para mejorar el servicio de transporte público en el estado y a la vez disminuir la emisión de contaminantes. Adelantó que en su sexenio se planea plantar un millón de árboles para contribuir a la reforestación. El jefe del ejecutivo estatal dijo que los políticos actuales están pensando en el 2050, pero no representan a la nueva generación de jóvenes. "No representan a las ciudades y regiones que son muy ambiciosas en el combate al cambio climático”, sostuvo.

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Con información de Excelsior