El retiro de Novak Djokovic parece ya tener una fecha, al menos para el tenista serbio existe un momento ideal en el que le gustaría tomar esa alternativa y quiere hacerlo en un escenario mundial. El dueño de 24 títulos de Grand Slam reconoció por primera vez que su meta de seguir compitiendo más allá de los 40 años podría no concretarse, pese a su deseo de despedirse en los Juegos Olímpicos de 2028, el escenario ideal para su retiro. Djokovic, quien logró el año pasado uno de sus sueños más grandes al ganar la medalla de oro para Serbia en los Juegos de París 2024, atraviesa un periodo de incertidumbre física y emocional. La falta de motivación y las lesiones lo han alejado de los grandes torneos esta temporada, incluyendo las Finales ATP de Turín 2024, de las que se retiró a última hora por una dolencia persistente. “Tenía muchas ganas de competir en Turín y dar lo mejor de mí, pero después de la final de hoy en Atenas, me entristece compartir que debo retirarme debido a una lesión. Lo siento de verdad por los aficionados que esperaban verme jugar; su apoyo significa mucho para mí”, dijo el jugador en sus redes sociales. Su ausencia en el torneo más importante de final de año reavivó las especulaciones sobre un retiro inminente. Sin embargo, Djokovic insistió en que su objetivo sigue siendo llegar a Los Ángeles 2028, aunque reconoció que ese sueño ya no depende solo de su voluntad. “Desde siempre he tenido un calendario en mi cabeza, sé lo que quiero y cómo lo quiero. Como ya he logrado todos los objetivos posibles, mencioné los Juegos Olímpicos de 2028 porque quería jugar muchos años más. Terminar allí, con la bandera de Serbia, sería algo muy bonito”, explicó. Sin embargo, él mismo admite que, aunque ese es su más ferviente deseo, no sabe si lo concretará. “No lo sé, realmente no lo sé, porque hay cosas que no están del todo bajo mi control. Intento estar lo más sano posible, mental y físicamente”. Djokovic ha realizado un calendario reducido en la temporada 2025 enfocándose en los Grand Slam y apariciones en los ATP 1000, todo con el objetivo de poder mantenerse en activo al más alto nivel, pero las lesiones comienzan a pasar factura a uno de los últimos históricos de la época de Rafael Nadal y Roger Federer, quienes ya han colgado la raqueta. FUENTE EXCÉLSIOR