Las desafortunadas muertes de dos alcaldes potosinos, Erika Briones de Villa de Reyes y Emmanuel Govea de Santa María del Río, en tan poco tiempo, dejaron dos huellas difíciles de borrar, tanto para sus gobernados como para sus seguidores. El trágico destino les jugó a ambas malas pasadas y solo hoy es el recuerdo el que perdura en su historia.

Historia que debe seguir y fue por eso que inmediatamente se activaron los mecanismos legales para los nombres de quien los debía sustituir. En Villa de Reyes Daniel Lagunas López ocupó el cargo y lo ha desempeñado sin mayor aspaviento. No así Edna Yuridia Medina Flores.

La regidora que tomó protesta en lugar de Govea sucumbió en la escena política potosina este fin de semana al presentar su renuncia.

Y no “por motivos personales” como acostumbran la mayoría cuando no tienen mayor argumento que dejar en el escritorio. Sea personal o político. Mientras menos ruido mejor. Se trata de un tema delicadisimo si se comprueban amenazas primero, de uno de los municipios más importantes del estado; segundo, pilar de una región del estado pilar de su economía; y tercero, de un municipio a tan solo 30 minutos de la capital. Las alarmas en las autoridades de los tres niveles de gobierno deben de prender y llamar su atención aún más. Hasta mañana…