El que las autoridades estatales de la SEGE pidan ayuda al Poder Legislativo, a fin de regular el uso de aparatos de comunicación como celulares en los salones por parte del alumnado, resultara inútil. Se trata de un tema de disciplina. De orden. De autoridad. Los maestros frente a clase deben de guardar y hacer guardar el orden y la atención en sus aulas por parte de sus alumnos. Esta disciplina y civilidad debe venir desde casa y ellos reforzarla y si no, aplicarla: poner atención en clases. Si el alumno saca el celular y está chateando o viendo otro contenido, al momento, debe ser exhortado a guardarlo o un correctivo mayor. Pero ese control y sanción no vendrá de una ley. No es necesaria. Se trata de un punto de autoridad magisterial. Sin temor. A las aulas se va a estudiar, no a ver redes sociales. La arrogancia humana es natural, todos y todas pecamos de ella, hasta los alumnos. A a nadie nos gusta que nos prohiban, es cierto. Pero el alumno debe entender y el maestro imponer su autoridad.  Aunque pese o duela. Es civilidad, no un capricho autoritario escolar. Únete a nuestro canal de WhatsApp para no perderte la información más importante 👉🏽 https://gmnet.vip/7Be3H