¿Culpables o inocentes de…?

De ser parte de la desgracia pública de una sociedad que ellos mismo han destruido fomentando la insolencia, la ignorancia, la improvisación a través de algunos, no todos, de sus candidatas y candidatos. ¿Culpables o inocentes de…?

De permitir que engrosen, muchas de sus ofertas electorales, personajes señalados en actos de corrupción que buscan el refugio del partido y en el posible posterior éxito electoral, la protección que el poder les otorga para así sortear sus delitos. ¿Culpables o inocentes de…?

De provocar la pérdida de credibilidad social por sucumbir ante los intereses de grupos que secuestran sus dirigencias, velando y viendo únicamente por los proyectos electorales y financieros de ellos mismos sin conjuntar a. ¿Culpables o inocentes de…?

De provocar la apatía del sector juvenil y nuevas generaciones, al advertir que la actual política -errónea de los partidos- no es más que el interés hambreado de cada tres y cada seis años. ¿Culpables o inocentes de…?

Y de entre otras desgracias sociales, seguir igual que como empezamos.

Aun y cuando saben sus dirigentes legales y de facto que es cierto, ni se inmutan, ni se afligen y menos se quejan. ¿Culpables o inocentes? ¿Los partidos o nosotros?