Mil 655 contratos nuevos inyectó la administración de Xavier Nava a las arcas municipales, de esos 429 fueron basificados. Ni Mario García y Ricardo Gallardo llegaron a tanto, de hecho, lo que hizo Nava se multiplicó por 4 lo de los dos antecesores.  80 se detectaron como posibles aviadores, causando daños al erario por más de 17 millones de pesos. Ayer fue el Alcalde Enrique Galindo quien salió a dar la cara frente a los señalamientos que han manifestado trabajadores cuyos contratos terminaron el pasado 30 de octubre. Casi 6 mil 516 trabajadores componen la nómina municipal actual y fue Xavier Nava quien le agregó esa cuarta parte. Histórico y vergonzoso. Trabajadores con más de 10, 15, 20, 30 años de laborar en el municipio capitalino han sobrevivido con contratos de cada 3 meses, trabajando.  Más de 300 han buscado sus jubilaciones y no se han concedido, pero sí la lograron en los últimos 3 años más de 345 por edad y con dudas de su mérito, para contratar el mismo número. Entre sueldos desproporcionados o los que andaban en campaña y ni la UAM conocieron, más vergüenza todavía. O sea iguales, iguales que los otros, como se cansaban de decir, no, no fueron. 

En este caso fueron peor.

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El organismo de servicio de agua potable y alcantarillado público mejor calificado del país es el de la ciudad vecina de León, Gto. Exitoso. Y es con esta tarjeta de presentación con la que se incorpora como titular al INTERAPAS el Ing. José Enrique Torres López en sustitución del Ing. Fermín Purata. A más de su experiencia como especialista en empresas públicas de agua potable, laboró en aquel organismo en la ciudad zapatera por más de dos décadas.  Si es cierto que el Interapas, para sobrevivir, debe de recibir una carga financiera insospechada, también es cierto que la labor que en primera instancia al arribar a su nuevo encargo Torres López tratara de descifrar las fallas en las que por años el órgano metropolitano ha caído y posteriormente tratar de encontrar las soluciones con lo que hay y con lo que se pueda. Por lo pronto ayer tuvo su bienvenida: una falla más, la N, en el ducto de El Realito. Esa si es una prueba. Hasta mañana…