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Engañado no estaba...
00:03 viernes 2 febrero, 2024
DESDE LA REDACCIÓN SLPLas fotografías circularon todo el día lunes. Sara y Rubén la publicaron: sentados en una mesa Sara Rocha, presidenta del PRI, Enrique Galindo, alcalde capitalino y aspirante a la reelección de su cargo y el Diputado Rubén Guajardo, quien también levantó la mano para buscar la candidatura por la alcaldía a través de la coalición PRI-PAN-PRD. Esperaban a David Azuara, nunca llegó o no le interesó. Analizarían la convocatoria para la candidatura por parte del tricolor. Documento que, entre otras reglas, si contemplaba la oportunidad a quienes no fueran priistas. Independientemente de eso, la dirigente estatal fue clara: "¡consulta y registro!". La primera legitima su aspiración. La alianza no tiene ni tiempo ni fichas para perderlas en aventuras egoístas y personalistas sin respaldo ni sentido. Y lo segundo, el registro, enfila y define el objetivo. (Más en el PRI, su disciplina les obliga a seguir y apoyar al registrado). Galindo y Guajardo supieron todas las reglas. Incluidas las no escritas. Despiertos o temblando, según la cantidad de cafeína o azúcar que consumieron esa mañana, se dieron la mano. Enterados y notificados que quedaban, se despidieron. Galindo tocó, más días atrás, las demás puertas. La del PRD no tuvo cerrojo y en la del PAN, a diferencia de lo que dijeron muchos panistas como Juan Francisco Aguilar, la puerta le fue empujada en contra por los “azuaristas”, como Cristina Govea o Aránzazu Puente (la primera dirigente municipal del blanquiazul y la segunda diputada local, ambas a quienes el mismo Galindo había apoyado para lograr su escalada política), entre otros y otras quienes buscaban apretar al actual alcalde -y sin duda carta única y más fuerte de la alianza- a fin de complacer los caprichos caciquiles del diputado federal huasteco. Fácil no la tuvo. Veronica Rodriguez, líder panista, supo sortear las presiones y ha sabido entender la lectura de lo que no solamente su partido tiene y puede apostar, sino de lo que la alianza puede ganar. La fotografía de la reunión del lunes siguió circulando esta semana.
Y Rubén Guajardo también. Con todo ese antecedente, el miércoles, el diputado panista, ofreció una rueda de prensa y su berrinche fue más allá de lo que políticamente se tolera: Declarar lo contrario a lo que sabías perfectamente y señalar vil, trapera y bajamente a un segundo, cuando en estricto sentido político sería al PRI, no a Galindo. Engañado no estuvo. Hasta el lunes.