Lo ocurrido en el servicio de aeronavegación de México es algo nunca antes visto. Se ha puesto en riesgo el valor más importante: la seguridad aérea. Y es que no de ahora, sino desde hace meses, se registraron diversos incidentes derivados del rediseño del espacio aéreo en marzo de 2021, sin embargo, hubo negación y silencio por parte de las autoridades de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), de Jorge Arganis Díaz Leal. También, conforme se acercó la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), aerolíneas comerciales, asociaciones, colegios de pilotos, y organismos internacionales, incluyendo la IATA, mandaron a un cajón las dudas y cuestionamientos que existían sobre la seguridad de las operaciones y sobre el desempeño del Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam). Aunque el gobierno federal ha tratado de justificar los errores de los controladores aéreos por una mala relación laboral, lo cierto es que la sustitución de personal con experiencia y la falta de capacitación y entrenamiento a la gente de nuevo ingreso ha sido la constante. La salida de Víctor Hernández es solo el inicio. Se requiere una revisión a fondo tanto del Seneam, y de su nuevo encargado, Ricardo Torres Muela, de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), al mando de Carlos Rodríguez, responsable de la investigación de incidentes y de la recuperación de la categoría de la aviación nacional, así como del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), de Carlos Morán. La tarea para Rogelio Jiménez Pons, subsecretario de Transporte, no es sencilla. Si en verdad hay voluntad política para romper con los viejos estereotipos de que la aviación nacional se debe operar como hace 20 años, y se deja hablar a los expertos aeronáuticos, podemos esperar un mejor momento para la industria aérea y sobre todo recuperar la confianza de que al abordar un avión lo hacemos con toda seguridad. NUEVO INCREMENTO En medio de los datos de inflación que conocimos en la semana —7.68 por ciento en su valor anualizado en abril—, diversos analistas señalan que mañana, cuando se reúna la Junta de Gobierno del Banco del México, que lleva Victoria Rodríguez Ceja, la institución se estaría alistando para un alza de 50 puntos base, ubicándola en 7 por ciento, —el movimiento iría en sintonía con lo registrado la semana pasada con la Reserva Federal (FED) en Estados Unidos—. Aún es prematuro saber el impacto real que tendrá el Paquete Contra la Inflación y Carestía (PACIC), anunciado la semana pasada, sin embargo, los expertos ven probable que la tasa de referencia podría cerrar 2022 en niveles de 8.50 por ciento. POR JAIME NÚÑEZ

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