Miguel Cabrera tuvo su primer juego en Grandes Ligas en Miami, y ahí podría, el próximo año, tener otro gran colofón. Cabrera debutó con los Marlines de la Florida en 2003, un año espectacular, donde ganó su único anillo de Serie Mundial, en su carrera de hasta ahora 20 temporadas. En 2023, Miami será la sede donde Venezuela jugará la primera y todas las posibles etapas del Clásico Mundial de Beisbol. Sería espectacular ganar el campeonato ahí, con Venezuela”, dijo Cabrera. “Obviamente tengo un gran cariño con la ciudad de Miami, por los años que viví ahí es innegable, pero también, ahora mismo hay una gran comunidad venezolana viviendo ahí, me imagino lo que podría ser jugar una final ahí, y sería una verdadera bomba, que ojalá se dé”. Cabrera ha estado en las cuatro ediciones del Clásico Mundial de Béisbol, y esta será apenas la primera vez que la semifinal y final se juegue en la costa este de los Estados Unidos, donde los venezolanos pueden tener un mayor apoyo, por parte de su gente. Venezuela perdió la semifinal en Dodger Stadium en 2009 ante Corea del Sur. Cuenta un poco, definitivamente, en el Este y en Miami en particular, si sentirá diferente, pero a final de cuentas lo que cuenta es lo que haces o no en el terreno de juego”, explicó. Pese a que el escenario ideal está pintado para que suceda así, Cabrera, de 39 años, no asegura nada. Yo siempre voy a estar disponible, si me llaman, si quieren que esté ahí, claro que ahí voy a estar”, dijo Cabrera. “Pero yo no estoy seguro, si a mi edad, puedo aportar lo mismo que un joven, que esté más en plenitud. Jamás me aferraría a ir, y bloquear a alguien que pueda ayudar más al equipo”. Cabrera aún tiene pendiente un año más de contrato asegurado con Detroit, por lo que espera, con 40 años, jugar su última temporada en 2023. Este año el comisionado le dio una invitación especial. EXCELSIOR