El Dr. José Alfonso Baños Francia, Urbanista, Investigador y profesor del Centro Universitario de la Costa (CUCosta) de la Universidad de Guadalajara (UdG), en su colaboración para “Así las Cosas” resaltó la importancia de contar con un Atlas de Riesgo como una herramienta que previene y da a conocer zonas vulnerables ante distintos fenómenos meteorológicos y de desastre, ante las recientes devastaciones provocadas por OTIS en Acapulco y por LIDIA en Puerto Vallarta. Señaló además que aquellos municipios que no cuentan con esta herramienta pueden apoyarse de los investigadores de diversas universidades de Jalisco que están dispuestos a aportar sus conocimientos, sin embargo, reconoció que no siempre son tomados en cuenta. Dijo que cada municipio y cada comunidad tiene ciertos recursos, además de que hay regiones con suficientes recursos humanos y tecnológicos para disponer de instrumentos acertados para trabajar en las temáticas, expertos de universidades que no son invitados por las autoridades o de plano son bloqueados, “ya que comentan los académicos que a los operadores gubernamentales simplemente no les gusta”, comentó. Ante los casos donde no cuentan con los recursos para elaborar un Atlas de Riesgo actualizado, comentó que se podrían crear Atlas de Riesgo regionales que el gobierno podría elaborar y tener una noción de protección al menos regional. “Al final los documentos no deberían estar guardados en un cajón, sino deben de ser instrumentos para la toma de decisiones, para que cuando enfrentemos una situación de riesgo, o de índole meteorológica o telúrica se sepa qué hacer”, puntualizó.  Agregó: “No solamente contar con instrumentos de prevención de riesgo, sino también fomentar cultura entre las comunidades para la prevención, y subestimamos a la naturaleza creyendo que no nos pasará. Lo que pasó en Acapulco nos obligó a vernos en un espejo y analizar estos aspectos”, señaló El urbanista consideró que los Atlas de Riesgo deben ser congruentes con la realidad del entorno y de la naturaleza, sin embargo, mencionó que en Puerto Vallarta y en Bahía de Banderas, aun contando con estos instrumentos, no se implementan como deber ser. “Aparecen intereses personales o de grupos que hacen que esto no suceda adecuadamente, hemos visto que en zonas de montaña donde se supone que no se debería construir por motivos de riesgo, hemos visto cómo los poderes empresariales se salen con la suya, ocasionando problemas a la larga a la comunidad”, puntualizó. Finalmente dijo que los Atlas de Riesgo son instrumentos que permiten tomar decisiones para proteger a la comunidad, y las autoridades como encargadas deben hacer que se cumpla, además de que los ciudadanos también deben aportar con responsabilidad civil y con una cultura de prevención ante el riesgo.