El acompañamiento de figuras gobernantes a precandidatos o candidatos, sin duda podría abonar a la polarización, la cual está estrechamente vinculada con la violencia, señaló Héctor Ramón Alonso Vázquez, docente de la Maestría en Gobierno y Políticas Públicas de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). Lo preocupante no es tanto el acompañamiento que hagan los gobernantes con los pre o candidatos, es que los operadores políticos en el nivel de calle pueden hacer: “En la ciencia política lo hemos estudiado, hay correlaciones altas entre polarización y violencia política que siempre es movilizada a nivel de suelo, es decir, al ras del suelo, en las calles, es decir, con operadores políticos que se enfrentan por votos”. Estos operadores políticos comúnmente tienen el respaldo de fuertes cantidades de dinero para movilizar el voto: “Ahí es importante que los gobernantes tengan en mente la prudencia y que las autoridades electorales no quiten el dedo del renglón, para evitar que esos operadores políticos, puedan caer en esos ciclos de violencia política, puedan generarla incluso”.  Si bien, la muestra de apoyo público a precandidatos o candidatos, “cada vez es más común en México”, las leyes electorales tendrían que medir cual es el papel institucional: “Yo he visto que los gobernantes han perdido más la prudencia institucional de ser autoridades”. Aunque tampoco se les puede negar el hecho de que son ciudadanos como cualquiera y que tienen derecho a sus preferencias políticas: “el gran detalle es que son gobernantes, son autoridades y al ser autoridades tendría que mediar cierta prudencia y cierta responsabilidad en esa representación”.