“Vulnerabilidad sindémica”, es un proyecto en el que trabaja el doctor Fernando Díaz-Barriga Martínez, catedrático e investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Este proyecto está aprobado por Conacyt, y con el que se pretende monitorear en diferentes comunidades indígenas, a las distintas enfermedades y las moléculas inflamatorias que atacan a los órganos principales, una vez que están en contacto con el covid 19. Sobre el término Sindemia, Díaz-Barriga explicó: “Sindemia es una condición de salud que puede empeorar por cuestiones sociales, ambientales, o de violencia, pero también con la presencia de otras enfermedades, y que se ha puesto de moda en estos días, porque iba a haber una interacción entre el virus de la influenza y el virus que causa el covid 19 y a esa interacción le llamaron sindemia”.  La covid 19 se caracteriza porque hay un exceso de producción de señales que inflaman el pulmón, pueden inflamar el corazón, el riñón, el cerebro, entre otros. “Este exceso de señales inflamatorias también son ocasionadas por contaminantes ambientales, como el flúor que tenemos en el agua de la ciudad de San Luis Potosí. De igual manera por las emisiones de las ladrilleras, o por toxinas naturales que contaminan el maíz que comemos”. De ahí la importancia de esta investigación, “nos preparamos durante seis meses y ya lo hemos echado a andar; empezamos a recolectar muestras, tenemos grupos organizado. Estamos trabajando en comunidades indígenas con grupos de mujeres, en donde vamos a monitorear las enfermedades, las moléculas inflamatorias y vamos a realizar una propuesta muy concreta para la vulnerabilidad sindémica”. Dijo también que desafortunadamente los casos de covid siguen en aumento por las variantes de la infección, “y está por demostrarse la efectividad de las vacunas, ya que pudieran no reconocer las reacciones del virus. Es importante hacerle ver a la población que el virus no está solo”. Finalmente, el doctor Fernando Díaz-Barriga Martínez señaló: “El riesgo del virus depende de nosotros; de nuestra dieta, de nuestros cuidados, de usar cubrebocas y ojalá algún dependa también de la vacuna”.