Vínculo copiado
La industria se recuperó en el 2018 al imponer un récord de taquilla.
18:11 sábado 5 enero, 2019
NegociosLas salas de cine murieron, dijeron. Tras caer las ventas de los boletos en el 2017, en gran parte debido a la peor temporada de verano en 20 años, especialistas por doquier pronosticaron el rápido descenso de la taquilla ante el auge del streaming. Pero este año las películas cambiaron el guion. Mientras Aquaman, Bumblebee y Mary Poppins Returns (El regreso de Mary Poppins) llegaron a la pantalla grande, las ventas de boletos alcanzarán un nuevo récord para el año, superando la marca previa del 2016 de 11,400 millones de dólares. Estimulada en parte gracias a acontecimientos culturales como Black Panther, Crazy Rich Asians (Locamente millonarios) y documentales como Won’t You Be My Neighbor?, la taquilla superó los 11,000 millones de dólares más rápido que nunca. Los ingresos brutos a nivel doméstico subieron casi 9% frente al año pasado y la venta de boletos cerca de 6 por ciento. Negocio Fuerte
El incremento no se vio sólo en Estados Unidos. Impulsadas por los cinéfilos chinos, las ventas de entradas a nivel mundial deberían, por segunda ocasión, superar los 40,000 millones de dólares. Arabia Saudita se declaró abierta a hacer negocios con Hollywood tras más de 35 años sin cines. Y en el Reino Unido las salas se encaminaron a su mejor año desde 1971. Las 10 películas más lucrativas del año fueron secuelas, relanzamientos o cintas basadas en libros de historietas. Hasta la favorita al Oscar A Star Is Born (Nace una estrella), con la que Warner Bros facturó 376.6 millones de dólares a nivel mundial, es un remake. Las tres películas más grandes del año —Black Panther, Avengers: Infinity War e Incredibles 2 (Los increíbles 2)— son todas del líder de mercado Disney, que también está en proceso de tragarse a 20th Century Fox. Pero hubo también algunos éxitos inesperados. Películas de mediano presupuesto como Bohemian Rhapsody, Halloween, Creed II (Creed II: Defendiendo el legado) y la cinta original mejor vendida del año, A Quiet Place (Un lugar en silencio), desempeñaron un papel importante en el nuevo récord de la taquilla. Por primera vez en la historia, cuatro documentales —RBG, Free Solo, Three Identical Strangers y Won’t You Be My Neighbor?— facturaron cada uno 10 millones de dólares. Como nunca las películas estuvieron en el centro de la conversación cultural, sobre todo con Black Panther, que llegó a ser el tercer mejor estreno doméstico de la historia (700.1 millones de dólares) sin tomar en cuenta la inflación. Ejecutivos de Hollywood dicen que este año demuestra que el 2017 fue una anomalía. “Cuando los expertos allá afuera hablaban del fin de la asistencia al cine, yo no lo creía”, dijo Jim Orr, jefe de distribución de Universal Pictures, que se apuntó éxitos con Jurassic World: Fallen Kingdom (Jurassic World: el reino caído), The Grinch (El Grinch) y Halloween. “Sólo fueron decisiones de programación aunadas a algunas películas que simplemente decepcionaron. La gente quiere salir. Quiere la experiencia social. Quiere estar en el cine. Y eso es algo que demostramos exponencialmente este año”. Auge del streaming
El repunte de la taquilla se produjo en un año en el que Netflix lanzó su más ambiciosa selección de películas originales, estrenando unas 70 cintas. Aunque Netflix se ablandó en cierto modo al proyectar tres de sus filmes (Roma de Alfonso Cuarón, The Ballad of Buster Scruggs y Bird Box) exclusivamente en cines antes de estrenarlas en su servicio de streaming, Netflix y los exhibidores discreparon en cuanto a los beneficios de la ventana cinematográfica tradicional. Pero existe una sensación creciente de que Netflix, después de todo, no es el enemigo número uno de los cines. En el 2018, Netflix ganó millones de suscriptores, del mismo modo en que los cines se levantaron. La coexistencia es posible. El mes pasado, una encuesta de la OTAN halló que 33% de los cinéfilos que ven más de nueve películas o más al año pasaron 15 horas semanales en plataformas de streaming. El streaming sólo estará más omnipresente en el 2019, cuando Disney y Warner Bros lancen sus propios servicios tipo Netflix. Pero ambos estudios se mantienen decididamente devotos a la exhibición en pantalla grande y a estrenar algunas de sus producciones principales en temporadas tradicionalmente lentas. El que la tendencia de la taquilla se mantenga en alza o vuelva a caer en el 2019 dependerá, como siempre, de las películas. Los analistas predicen con optimismo otro récord gracias a próximos estrenos de Disney que incluyen Avengers: Endgame, Captain Marvel, Frozen 2 y Star Wars: Episode IX. EL ECONOMISTA