El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, llegó la mañana de este lunes a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) con las supuestas pruebas de que Morena es un ‘narcopartido‘. La intención del mandatario estatal es hablar con el ministro presidente Arturo Zaldívar, después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador se negara a recibirlo en Palacio Nacional el pasado 29 de junio.

El gobernador Silvano Aureoles advirtió que no se cansará hasta que alguna autoridad federal reciba las pruebas que tiene contra Morena, pues asegura, hacerlas públicas pondría en riesgo la vida de las personas. "Soy consciente de la gravedad de los hechos que ponen en riesgo el futuro de la nación”, afirmó en Twitter. Fue el pasado 23 de junio cuando el gobernador de Michoacán afirmó que Morena es un ‘narcopartido‘ y prueba de ello, dijo, es que el partido ganó todas las entidades del corredor Pacífico. "Todo el corredor del Pacífico lo gana Morena, ¿y quién está detrás de Morena?, el crimen organizado, lastimosamente”, sentenció en entrevista con Ciro Gómez Leyva. En respuesta, el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, rechazó que el partido esté vinculado al crimen organizado y calificó los señalamientos de Aureoles como “patadas de ahogado” en un intento por anular la elección en Michoacán, cuyo triunfo fue para el candidato morenista Alfredo Ramírez Bedolla. "El gran miedo de Silvano es que va a tener que rendir cuentas del gobierno que hizo, y es un gobierno lleno de corrupción, un gobierno donde creció la violencia”, dijo en entrevista con Joaquín López-Dóriga. Con información de López-Dóriga Digital