La Máquina se descarriló en La Corregidora tras caer ante los Gallos Blancos de manera sorpresiva y puso fin a una racha de 13 partidos oficiales sin conocer la derrota, misma que comenzó en enero.  Los celestes no tuvieron la chispa de otros encuentros, el equipo no fue claro en ataque y se cometieron errores importantes en defensa que, como consecuencia, le dieron a La Máquina un fuerte llamado de atención para lo que será el Guard1anes. Cruz Azul fue amplio dominador en el arranque de partido y puso en serios aprietos a la escuadra queretana con varias llegadas; sin embargo, el arquero Gil Alcalá fue pieza clave para que los locales mantuvieran el cero. 

Alcalá tras tapar un disparo de La Máquina | MIGUEL PONTÓN La Máquina generó y tuvo sus opciones al frente, pero perdonó y fueron los Gallos quienes se mostraron más contundentes gracias a un error en el cuadro bajo celeste por parte de Josué Reyes, que fue bien aprovechado por Kevin Ramírez al 28’. 

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Ante el apuro celeste, el conjunto de la Corregidora se tiró unos metros atrás para buscar el contragolpe, mientras que Cruz Azul creció en una inoperante posesión de balón, al punto de volverse predecible.  Por si no fuera suficiente el gol en contra, La Máquina se vio sorprendida por la propuesta de Alex Diego en el complemento, ya que los Gallos apostaron por tener la pelota en los primeros instantes. Después de varios minutos, los queretanos cerraron filas y nuevamente retrocedieron contra su área para esperar a los celestes. Con el pasar de los minutos, Cruz Azul perdió el hilo del partido, sus ataques perdieron fuerza y con ello permitió que los Gallos sufrieran lo menos posible en la recta final del encuentro, donde incluso tuvieron algunos acercamientos a la portería de Jesús Corona.  Cruz Azul regresa este sábado al Estadio Azteca para medirse a los Bravos de Juárez, en el final de la fecha doble donde aspirarán a un máximo de siete puntos.

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Récord