Los jugadores de los dos grandes clubes portugueses de fútbol, Benfica y Porto, retomaron este lunes las sesiones de entrenamiento de manera individual, respetando las medidas de distancia social. En Lisboa, gel hidroalcohólico para desinfectar las manos, toma de temperatura y mascarillas de protección para los jugadores del Benfica a su llegada al centro de entrenamiento de Seixal, donde debían respetar circuitos específicos para desplazarse, según las imágenes difundidas por el club. Los jugadores trabajaron de manera individual tanto por la mañana como por la tarde. "¡Estamos de vuelta!", proclamó Bruno Lage, entrenador del Benfica, en un mensaje publicado en la web del club, recordando "el contexto inédito tanto para los entrenadores como para los futbolistas". Todos los entrenamientos importan. Incluso aunque durante un cierto tiempo tengamos que hacer sesiones individuales", precisó.

En el Porto, los jugadores volvieron también al terreno de entrenamiento de Olival divididos en grupos, con medidas sanitarias similares a las del Benfica. Portugal comenzaba este lunes a suavizar las medidas de confinamiento. Los clubes portugueses se preparan para una eventual reanudación de la liga portuguesa en el último fin de semana de mayo, a puerta cerrada y siempre que su protocolo sanitario reciba el visto bueno de las autoridades. La posibilidad de reanudar la liga de fútbol de primera división, detenida desde marzo por la pandemia del nuevo coronavirus, y la disputa de la final de la Copa de Portugal son "la única excepción" entre las competiciones deportivas del país. El resto continuarán sin poder reanudarse, explicó la pasada semana el primer ministro del país, Antonio Costa.

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Excelsior