CIUDAD DE MÉXICO.- Este año y el próximo serán de importantes desafíos para la economía mexicana y la política monetaria debido a la trayectoria de la inflación y los riesgos al alza que penden sobre ella, así como por la posibilidad de aumentos de tasas en EU, por lo que persiste la posibilidad de incrementos adicionales en los tipos de interés en México en los meses subsecuentes, advirtió Javier Guzmán Calafell. El subgobernador del Banco de México resaltó que si bien el nuevo objetivo de la política monetaria es llevar la inflación al 3% en el primer trimestre de 2019, de materializarse algunos riesgos pueden implicar la postergación de este objetivo. En un reciente discurso ante miembros de la American Chamber of Commerce Northeast Chapter, en Estados Unidos, explicó que el objetivo de Banxico de incrementar la tasa de interés de referencia a principios de febrero es llevar la inflación a su meta de 3% y también “proteger a la economía mexicana de los riesgos derivados de los esperados aumentos en la tasa de fondos federales en Estados Unidos en marzo de este año”. SINERGIA Recordó que se realizan ajustes similares en ambos países, por lo que el diferencial entre las tasas se mantendría constante. Pero al margen de lo anterior, agregó, la necesidad de un cambio adicional en la postura de la política monetaria en México dentro de ese marco de tiempo, tendría que ser evaluado sobre la base de la información de la inflación y sus perspectivas. Recordó diversos riesgos económicos y geopolíticos que podrían afectar a México, como la incertidumbre sobre la renegociación del TLCAN y las elecciones en México, entre otros. "Sobre todo por las razones ya explicadas, 2018 probablemente sea un año desafiante para la economía mexicana”, advirtió.

Si bien la política monetaria es una pieza fundamental para encarar esos desafíos, es sólo un componente de un conjunto de herramientas disponibles, recalcó. Subrayó que el ajuste fiscal del último par de años ha permitido registrar un superávit primario y revertir la tendencia al alza de la deuda pública como porcentaje del PIB; el tipo de cambio flexible ha funcionado eficientemente como un amortiguador con el apoyo de un mecanismo de cobertura de riesgos cambiarios. Además, las reservas internacionales pueden ser consideradas adecuadas según los estándares internacionales, y la Línea de Crédito Flexible con el Fondo Monetario Internacional está disponible en caso de necesidad, remarcó. A ello se agrega el hecho de que el sector financiero está bien capitalizado, es rentable y líquido, sin riesgos evidentes de naturaleza sistémica, consideró el funcionario. Expertos ven más restricción monetaria Cada vez más analistas del sector financiero consideran que el Banco de México continuará con una política monetaria restrictiva durante este año. La Encuesta Citibanamex de Expectativas presentada ayer reveló que 11 de 24 analistas consultados (46%) considera que la tasa objetivo cerrará este año por encima del nivel actual de 7.50%, en contraste con la encuesta anterior, en la que 6 de 25 especialistas (24%) veía esta misma situación. Pese a que el consenso del mercado ubicó el nivel de cierre de la tasa de referencia en 7.50% en 2018, anticipa que el próximo movimiento por parte del banco central será en mayo, con un incremento de 0.25 puntos porcentuales. La encuesta destacó, sin embargo, que “33% de los encuestados (8 analistas) señaló que habrá un alza de 25 puntos porcentuales en la junta de abril”.

Para 2019, los expertos consultados por Citibanamex proyectan una tasa de referencia que cierre en 6.50%, lo que implicaría una reducción neta de un punto porcentual respecto al nivel actual. En lo que se refiere al tipo de cambio, los especialistas financieros participantes en la encuesta aumentaron su previsión para este año, desde 18.60 pesos por dólar hasta 18.65 pesos. En contraste, para 2019 pronostican un peso más fuerte, cerrando en 18.31 pesos por dólar frente al 18.46 pesos de la encuesta previa. Finalmente, las expectativas sobre la inflación y el crecimiento económico se mantuvieron sin cambios en esta encuesta. Sobre la primera, el mercado espera 4.11% anual de variación del Índice Nacional de Precios al Consumidor este año y 3.60% el siguiente año; y sobre la segunda, anticipan prevén que el Producto Interno Bruto se incremente en 2.3% este año y 2.5% el siguiente. -- EXCÉLSIOR