Ya ha pasado casi un año de que Andrés Saúl Escobedo Jaramillo, egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) ganó un amparo, el cual le acreditaba el poder utilizar de manera lúdica o recreativa la marihuana, pero a pesar de esto, hasta el momento no ha podido hacer uso de la droga por “topes” legales que le coloca la Comisión Federal contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).  Comentó que es un proceso largo el que ha tenido que atravesar, ya que, para consumir la marihuana, debe de tenerla de manera completamente legal, por ello, pidió semillas a Canadá para poder sembrarla y posteriormente utilizarla de la manera que así lo requiera.  Aclaró que tuvo que recurrir al país de la flor de maple debido que ese país a nivel federal ya se puede consumir la cannabis, a diferencia de Estados Unidos, en donde la aprobación de dicha planta se ha dado de manera estatal, por lo que prohíbe la importación de la semilla o cualquier producto de la semilla de cannabis en cualquiera de sus presentaciones (sativa, índica y americana).  Andrés Escobedo afirmó que existen otras 30 personas amparadas a nivel estado, pero su proceso es detenido por la Cofepris, quien otorga dicho amparo a los solicitantes, pero al mismo tiempo las detiene con otro amparo, lo que hace un proceso difícil para los interesados, por lo cual lamentó que dicho órgano federal detenga a las personas del uso lúdico de la marihuana, ya que estas lo requieren principalmente por problemas de salud, como el cáncer. 

Afirmó de igual manera que la Cofepris en sus documentos otorgados, no explica los límites para el uso de la marihuana, como: ¿Cuánta cantidad se puede transportar? ¿En qué límites de tu casa se pueden plantar?, por lo que deja un vacío legal en contra del amparado que puede ser destino y utilizar este documento en su contra.