El dictamen de reformas a la Ley de Petróleos Mexicanos elaborado por Morena y dado a conocer ayer en la Cámara de Diputados quita facultades al Consejo de Administración de la empresa productiva del Estado y permite al titular del Ejecutivo, a través del director general de la petrolera, “ejecutar, administrar y operar el plan de negocios y sus empresas productivas subsidiarias y filiales”, entre otros aspectos que buscan otorgar más poderes al titular de Pemex. Además deja la puerta abierta para realizar contratos con terceros para explotación y extracción de hidrocarburos. “La presente iniciativa pretende establecer un marco jurídico que garantice y permita al director general dirigir, ejecutar, administrar y operar Petróleos Mexicanos y las diversas empresas que la componen de manera integral para ejecutar y cumplir con los objetivos de exploración, explotación y refinación”, señala el dictamen, del cual tiene copia MILENIO. Plantea además el control del director en los precios de bienes y servicios, los lineamientos para pagos extraordinarios y donaciones, así como aquellos para el desmantelamiento y enajenación de las instalaciones, y cualquier otro proyecto que, por su relevancia o trascendencia, deba autorizar el Consejo. “CONDUCCIÓN ESTRATÉGICA” Este sábado, la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados distribuyó el dictamen con proyecto de decreto con el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley de Petróleos Mexicanos, en el que se confieren atribuciones al director general de la empresa productiva, que actualmente solo tiene el Consejo de Administración. En el documento se propone también “una correcta distribución de las facultades que deben tener tanto el director general de Pemex como su Consejo de Administración; de tal suerte que, como lo dictan las mejores prácticas de gobierno corporativo, el director general tenga la capacidad de la conducción central y estratégica de la empresa productiva, sus empresas productivas subsidiarias y filiales, así como de cualquier empresa en donde Pemex tengan directa o indirectamente capital accionario”. Además quita el candado que impide realizar contratos con terceros para la explotación y extracción: “Pemex podrá celebrar con terceros contratos para la exploración y extracción a la que se refiere la Ley de Hidrocarburos y la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos, ya sea individualmente o mediante asociación o con participación de particulares”, señala el dictamen. También propone que el director general pueda nombrar y remover a los directivos de Pemex, así como establecer lineamientos relacionados con tabuladores y recursos humanos, facultades que hoy tiene el Consejo de Administración. Con ello, el consejo, que actualmente es la máxima instancia de administración de Pemex, podrá ejercer sus facultades únicamente “a propuesta del director general”, con lo que se le restan poderes a dicho órgano. Entre las atribuciones que, de acuerdo con el dictamen derivado de la iniciativa presentada por la diputada de Morena Karla Yuritzi Almazán Burgos, deberán pasar por la aprobación del director de Pemex están: aprobar, revisar y actualizar el plan de negocios de la paraestatal y sus empresas productivas subsidiarias, fijar y ajustar los precios de los bienes y servicios que produzca o preste la empresa, aprobar las directrices y políticas generales relacionadas con inversiones, así como celebrar alianzas estratégicas con personas físicas y morales. Además el director general, cargo que en este momento ostenta Octavio Romero Oropeza, podrá también fijar las políticas y bases generales para determinar el factor de rentabilidad con base en la cual Petróleos Mexicanos y sus empresas participarán en concursos para adjudicación de contratos en exploración y extracción de hidrocarburos. Añadido a lo anterior se elimina el Comité de Recursos Humanos y Remuneraciones, el cual está facultado para proponer al Consejo de Administración el mecanismo de remuneración del titular de Pemex y los tres niveles jerárquicos inferiores, así como definir la política de contratación, de evaluación de desempeño y de remuneraciones del resto del personal, entre otras funciones que ahora asumirá el director general. En el artículo 14, relativo al Plan de Negocios de Petróleos Mexicanos, en el dictamen se agregó que la petrolera deberá actualizarlo cuando se presenten escenarios de crisis económicas profundas, cambios en el mercado petrolero internacional o se contemple la realización de nuevos proyectos de gran magnitud de mejoras tecnológicas, así como nuevas adquisiciones prioritarias. EL DIRECTOR, AL CONSEJO El documento presentado como propuesta establece también que el Consejo de Administración estará integrado por 10 consejeros y un invitado permanente, que será el director general de Pemex, con voz pero sin voto; sin embargo, deja claro que este órgano no podrá sesionar sin su presencia. Plantea además reducir de 10 a cinco años el requisito de experiencia de los consejeros independientes. La legislación actual establece que dichos consejeros deberán ser designados por su experiencia, capacidad y prestigio profesional, así como por haberse desempeñado durante al menos 10 años en actividades que les proporcionen la experiencia necesaria para cumplir con las funciones de consejero de la petrolera, ya sea en los ámbitos profesional, docente o de investigación. Sin embargo, la reforma flexibiliza esta exigencia. El Consejo de Administración está integrado por 10 consejeros. Quienes lo presiden y tienen voto de calidad son la secretaria de Energía, Rocío Nahle, y el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Carlos Urzúa, así como tres consejeros del gobierno federal designados por el Ejecutivo y cinco consejeros independientes, designados por el Presidente de la República y ratificados por el Senado de la República. De estos últimos, actualmente dos se encuentran vacantes. Y ADEMÁS CABILDEO

El pasado miércoles, Elvira Daniel Kabbaz, directora del Centro Nacional de Control del Gas Natural, y Luz María Zarza, directora jurídica de Pemex, se reunieron con legisladores de Morena, entre ellos el presidente de la Comisión de Energía, Manuel Rodríguez González, para afinar el proyecto de dictamen. Los diputados destacaron que el objetivo es fortalecer la rendición de cuentas, un enfoque anticorrupción y aumentar la transparencia.