Justo antes de salir de vacaciones el presidente de los Estado Unidos de América Donald Trump firmó el decreto de la reforma fiscal para su país, el cual originó ciertos desperfectos en nuestra economía, tan solo el dólar estadounidense llego a los valores que estaban en el pasado mes de marzo, ¿pero en que consiste la tan mencionada reforma?, aunque la reforma consiste en más normas y reglamentos me gustaría solo retomar tres de ellos: Primero; los impuestos a las personas morales se reducirían del 35% al 15%, segundo; los impuestos a las personas físicas se reducen a tres niveles, 10%, 25% y 35%, tercero; las empresas no tienen que pagar impuestos por ganancias en el extranjero, ahora entiende el porqué del golpeteo a nuestro país. Al reducirse los impuestos en Estados Unidos, este país se vuelve más atractivo financieramente y por supuesto muchas de las empresas internacionales verán como unfacilidad el instalarse en eses país o bien a quedarse donde laboran, si es que radican en USA. Aparentemente todo pintaría bien para nuestro vecino país, pero hay algunas dudas que surgen: los impuestos que el gobierno cobran y este se destina básicamente a invertirlos en obra pública, al pago de gastos corrientes (sueldos y salarios) y por supuesto al pago de deuda pública que todo país tiene, por lo que sin el dinero proveniente de los impuestos el gobierno norteamericano se va a ver en la disyuntiva de decidir entre pagar sueldos y salarios, hacer obra pública o en último de los casos deuda pública para subsanar el faltante. En fin, pareciera ser que la situación del país más grande del mundo -económicamente hablando- no es tan fácil, tal parece que la necesidad de presentar triunfos o resultados por parte de su administración hace buscar soluciones fáciles y rápidas en vez de prácticas y firmes, en fin, por lo pronto nosotros a sufrir un rato, el único consuelo que nos queda es que estamos acostumbrados, lo cual es lamentablemente es mal consuelo. @Oliver_Arroyo