“Vienen tiempos oscuros, y más oscuros aún”, aseveró el expresidente Alberto Narváez Arochi tras el asesinato de Julio Galindo Pérez y la marcha silenciosa que encabezó el pasado martes El empresario aseveró que los políticos deberían estar avergonzados de lo que ocurre en el país y en San Luis Potosí, “a plena luz del día puedes matar a alguien, puedes violar a quien quieras, a ejecutar a alguien, ¿De verdad es importante la política? Absolutamente no”. El Estado, resultado de la política no ha dado los resultados que la población espera, no en materia de seguridad, “Qué estamos haciendo con el país, por mi se debería detener todo”. La seguridad no existe en el país dijo, ya que si no existe una garantía, el desarrollo económico y social no puede existir, “se está cayendo a pedazos todo, no es posible seguir así, y como población no estamos haciendo nada”, sentenció. “Por eso nuestra rabia, nuestra desesperación”.