MONTERREY, NUEVO LEÓN.- Por primera ocasión desde que entró en operaciones en octubre de 2016, una persona será castigada con cárcel por realizar una llamada falsa al 911. Lo anterior sienta un precedente en la entidad, ya que no se había determinado una medida así para alguien que alertara a las autoridades en falso. El individuo a quien le fue notificada su sentencia de cuatro meses en el Penal del Topo Chico fue identificado como Lázaro Gutiérrez Hernández. Se informó que el hombre reportó una situación de alarma en el domicilio de su expareja sentimental, pero cuando llegaron las autoridades se toparon con que era una llamada falsa. Los hechos se registraron en el mismo 2016, apenas unos cuantos días después que entró en operación el servicio. La expareja del hombre ayudó para la investigación que permitió procesarlo. Se estableció que Lázaro Gutiérrez Hernández podría recurrir a algún recurso legal para evitar ir a prisión. POR LLAMADAS FALSAS, BOMBEROS DE CDMX PIERDEN 51 MDP CADA AÑO

El Sindicato de Bomberos de la Ciudad de México exhortó a la ciudadanía a no realizar llamadas falsas o de broma, porque además de poder retrasar la atención de una emergencia real se pierden cada año 51 millones de pesos al movilizar personal y carros de forma innecesaria. En un comunicado, el secretario general de este gremio, Ismael Figueroa Flores, dio a conocer que al año atienden en promedio 60 mil servicios, de los cuales aproximadamente tres mil son llamadas falsas. Refirió que la salida de un equipo de bomberos tiene un costo promedio de 17 mil pesos, que multiplicados por la cifra de llamadas de emergencia falsas equivale a cerca de 51 millones anuales. El líder sindical expresó que la Ciudad de México tiene aproximadamente dos mil bomberos y cuentan con un presupuesto de mil 30 millones de pesos, sin embargo, indicó que es insuficiente para atender las emergencias que se presentan en la capital. Figueroa Flores recordó que en 2013 y 2015 se les entregó equipo, pero el trabajo que desarrollan a diario los elementos, hace que este tenga un desgaste mayor y en consecuencia hay que renovarlo para no poner en riesgo la vida del personal. El contar con unidades de reciente modelo, vehículos con valor de ocho millones de pesos o escalas de 30 millones para servir a la ciudadanía, no es un lujo para los bomberos sino un beneficio de la ciudadanía para brindarle un mayor y rápido servicio. -- Excélsior