A punto de cumplirse un año del sismo de magnitud 7.1, la reconstrucción de viviendas en Puebla sigue lejos de concluir. En cuanto a las acciones a través de las agencias productoras de vivienda (apv), el avance es de 53 por ciento, con mil 340 casas terminadas. El resto aún se encuentran en proceso: 737, equivalente a 29.4 por ciento, ya poseen cubierta; 241, es decir, 9.6 por ciento, están en la colocación de los muros; y 141, 5.6 por ciento, en proceso de cimentación. Incluso hay 36 damnificados, el 1.4 por ciento, que todavía están en suministro de materiales, y 9 más, 0.3 por ciento, en firma de contrato. De acuerdo con datos oficiales disponibles en el portal Puebla Activa, sólo un 30 por ciento del total de los beneficiarios que optaron por la autoconstrucción ya concluyeron la edificación de sus hogares. Sin embargo, pese a la tardía entrega de las tarjetas de apoyo, las enfermedades o la falta de un lugar donde dormir, muchos afectados por el sismo no han perdido la esperanza. Algunos de los damnificados que apenas van a iniciar su reconstrucción, como Alejandra Sánchez y cuatro integrantes más de la familia, cumplieron ya 12 meses de vivir en una tienda de campaña. La mujer, mayor de edad, recibió la tarjeta de ayuda en agosto pasado, 10 meses después de la tragedia, y apenas en septiembre le confirmaron que ya tenía fondos para adquirir material para su obra. "Desde el terremoto que estamos aquí, somos varios, pero gracias a Dios ya nos enviaron la tarjeta, aunque sea para puro material", comentó. "No alcanza para los albañiles, no es suficiente, porque unos cobran 55 y otros 60 mil pesos, además de que el material va subiendo. Lo que ahorita estoy pensando es en cómo hacerle para construir el cuarto", dijo. Comentó que es diabética, que enfrentó problemas de salud en este lapso debido a que vivía prácticamente en la calle y, aunque ahora no tiene el dinero suficiente, desea comenzar la edificación de su vivienda lo más pronto posible. Félix Vázquez, así como Alejandra, es otro de los damnificados que arrancará con la construcción de su casa. Admitió que en su caso se trató de daño parcial, pero durante tres meses su tarjeta no tuvo fondos para las obras. "Ha sido difícil por la situación porque no había fondos para construir, hubo problemas porque no se había podido cobrar, no se podía entregar el material y hasta ahora sí (estamos reconstruyendo). "Ahora sí lo que se pediría es que liberen todos los fondos, que no se detenga el dinero", manifestó. En Puebla hubo afectaciones en 102 municipios, pero en más del 70 por ciento aún hay damnificados que en un año reportan avances de 50 por ciento o menos en la recuperación de sus viviendas. Los afectados atribuyeron el problema a las tarjetas que recibieron de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).

REFORMA