¿Qué podrá informar Juan Manuel Carreras en su último año? Bien podríamos ayudarle a refrescar su nublada memoria para detallar aspectos que hicieron que este sexenio fuera verdaderamente desastroso.  El mandatario de San Luis Potosí, podría empezar su informe más o menos así:  Estoy eternamente agradecido con Fernando Toranzo por haberme heredado el puesto, dedazo que supe gratificar con creces. Lo encubrí y protegí como nunca antes se había visto. Los millones de pesos que se desaparecieron en la dirección de pensiones, serán cargados a la próxima administración. Tal como se lo prometí en su momento, hoy le puedo decir: misión cumplida. Logré colocar en puestos claves a mis entrañables amigos y los convertí en fiscales carnales, a mi querido Federico en la Fiscalía General y a mi ahijado adorado en la Fiscalía Anticorrupción.   De forma modesta, considero que logré desestabilizar el Sistema Estatal Anticorrupción, hoy es un bodrio vegetativo, inoperante y con orgullo lo digo, una verdadera vergüenza nacional. Eso tiene su mérito.  Sé que muchos empleados de mi administración entre ellos enfermeras del hospital central, me han estado recordando el diez de mayo, solo porque les fueron retenidos unos 550 millones de pesos de su dinero y no se los hemos podido regresar. Les pediría un poco de comprensión y que lo tomaran como una pequeña aportación para mi retiro y un viaje a Europa que estoy pensando hacer. Les quiero pedir que me crean, que las percepciones que se publicaban en la Plataforma Estatal de Transparencia eran reales. Yo apenas percibía 46 mil pesos netos mensuales y los secretarios mi gabinete recibían 33 mil pesos. ¿No estarán pensando que manejábamos una nómina secreta verdad? En el tema de la inseguridad, no debe preocuparnos tanto, porque si nos comparamos con Siria, Afganistán o Iraq no andamos tan mal. Gente alarmista ha estado revisando los datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública y muestran que crecieron de una manera descomunal los diversos delitos, de mi parte también seguí la estrategia de “abrazos no balazos” y eso de hacerse de la vista gorda, como que no estuvo tan mal. Estoy muy satisfecho por la forma en que mi incondicional subordinada, manejó los Servicios de Salud. Mónica Rangel fue mucho más efectiva que cualquier pandemia, como buena alquimista me sorprendió como manejaba cientos de fantasmagóricas empresas para desaparecer millones y millones de pesos. Fue una de mis más eficientes colaboradoras y pude convertirla en una gran actriz, que sabía cómo soltar una lagrimita en los momentos clave, Reconozco también, la impresionante forma para elevar hasta dos mil 628 millones de pesos, la deuda del sector salud. Eso tiene su mérito. Sé que, desde hace doce largos años, se hizo el compromiso de tener en nuestra ciudad capital el Metrobús. Pero comprendan, que el tiempo nos alcanzó y por mínimos detalles, como errores en el proyecto, se duplicó poquito el costo en más de 111 millones de pesos. Veamos las cosas positivas, después de esperar una docena de años, ya faltan menos años.  Y quiero concluir diciéndole de frente y de forma muy clara, a todos aquellos que me han criticado y señalado que fui un gris y pusilánime mandatario, que durante mi sexenio sumé año tras año, errores, incapacidad, tibiezas, corruptelas, encubrimientos y una falta de visión impresionante, que fueron arrastrando a San Luis Potosí en una debacle, a todos ellos les digo: “Que tienen toda la razón”.