El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, calificó de "devastadores" a los efectos que una dura temporada de lluvias deja en su país desde octubre pasado, provocando la muerte de 21 personas y heridas a 49. "El invierno está provocando efectos devastadores", dijo el mandatario en una entrevista concedida a la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión (AER). Moreno, quien en los últimos días sobrevoló áreas inundadas, agregó que la costa ecuatoriana "sufre el embate de la naturaleza" y apuntó que los aguaceros no tienen relación con el fenómeno de El Niño, que aumenta la temperatura promedio del planeta y origina cambios climáticos como lluvias y sequías. "No es un fenómeno de El Niño, no configura un fenómeno de El Niño", señaló. Los aguaceros que golpean a Ecuador desde octubre último han afectado a 32 mil 178 personas y también dejan 700 damnificados, según un balance global del Servicio Nacional de Riesgos y Emergencias (SNGRE) del lunes. La cifra oficial de personas afectadas era de 32.025 hasta el pasado sábado. El organismo de socorro indicó que episodios de la época invernal como aluviones e inundaciones destruyeron 120 viviendas y 8.419 hectáreas de cultivos, así como han afectado otras 8.453 casas, 201 infraestructuras educativas, ocho centros de salud y 26.668 hectáreas adicionales de sembríos. Las lluvias azotan a todo el territorio continental de Ecuador, incluidas provincias fronterizas con Colombia (norte) y Perú (sur). Seis provincias costeras están declaradas en alerta naranja (previa a la roja, de máxima peligrosidad) por las torrenciales precipitaciones. --

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