CIUDAD DE MÉXICO.- Puede que suene obvio, pero cuando nos da el impulso por comprar de forma compulsiva, ponemos como pretexto la salida de supuestas “ofertas” que no lo son en realidad. Son más comunes en casos en los que confundimos (o posiblemente, omitimos), reflexionar sobre en qué tipo de condiciones compraremos un producto cualquiera. En ese sentido, existe una diferencia enorme entre los “meses sin intereses” y los descuentos. Aunque ambos pueden ayudarnos a gastar de forma eficiente, es necesario que marquemos sus diferencias. Descuento Se trata de la reducción del precio de tienda (inmediato anterior), en un producto. Generalmente se refleja en un porcentaje que habremos de restar del precio indicado en la etiqueta. Significa en el hecho, un ahorro de dinero, en comparación con el costo anterior, aunque en estos casos, recomendamos comparar entre tiendas, pues un mismo producto pueda cambiar su precio en distintos lados. Meses sin intereses Son oportunidades de compra a pagos diferidos (en meses) que amortizan el impacto de pagar por un producto en una sola emisión. La ventaja, es que, al utilizar este servicio, generalmente se requiere como intermediaria una garantía, la más popular es la tarjeta de crédito. No implica necesariamente la reducción del precio, por lo que tendremos que tomar en cuenta, que, aunque se nos hará más fácil pagar por el producto, no estamos aprovechando un descuento y tendremos que pagar por la cantidad indicada en la promoción. -- EXCÉLSIOR