Vínculo copiado
Son 25 las que deben atenderse con urgencia, pues las lluvias podrían empeorar su situación: Protección Civil
01:52 lunes 16 octubre, 2017
San LuisExisten al menos 25 fincas que se han detectado como de alto riesgo de colapso en el Centro Histórico, por parte de la Dirección de Protección Civil Municipal, a cuyos propietarios se están entregando cartas de afectación para que acudan al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y se pueda autorizar la mitigación de riesgo y demolerse o remodelarse, señalo Félix Herrera Ortega, titular de la dependencia. Detalló que dentro del padrón que se tiene se ubicaron 25 viviendas en alto riesgo, otras 25 en riesgo medio y 50 fincas en bajo riesgo; las cuales es importante que se dé mantenimiento y se autorice la mitigación de riesgo, a fin de evitar problemas como el que sucedió en la calle Gómez Farías en el barrio de San Miguelito, finca que no tuvo el mantenimiento debido y los dueños están en un proceso para desalojar a las personas que invadieron la propiedad. “Es un caso muy preciso, el predio está invadido por otras personas y los dueños están en proceso para desalojarla finca, mientras esto sucede nadie ha dado mantenimiento al interior”.
Dijo que en la mayoría de las fincas que se tienen en el padrón, se ha encontrado que son fincas intestadas, en litigio o que han sido invadidas como el caso mencionado, por lo que la mayoría de las veces no se les da el mantenimiento. Explicó que el proceso que se sigue es identificarlas, luego notificar a Desarrollo Urbano y al INAH, para posteriormente ubicar al propietario y el estatus de la finca. “Cuando le pasamos la información a Desarrollo Urbano, se les notifica a los dueños, algunas veces vienen, otras no, aunque el INAH no acceda a la remodelación o demolición, es responsabilidad de los dueños dar mantenimiento al interior”.
Los vecinos del Barrio de San Miguelito aseguran que estas fincas son un riesgo constante, pues muchas son de material poco resistente, sobre todo a las lluvias, como es el adobe, por lo que se debería autorizar su remodelación o demolición. “Inclusive aquí ya ha habido varias muertes, borrachitos o gente malviviente que no tiene dónde quedarse y se quedaba en las fincas y se derrumbó una vivienda, es también un foco de infección muy grande, no hay autoridad alguna que prevenga”, reclamó José Luis Reyes, vecino de la zona.
Cabe señalar que muchos de los propietarios dejan las fincas, las rentan, y simplemente dejan que el tiempo las derribe para evitarse los trámites o los costos de seguir los lineamientos del INAH.