Este lunes dueños y representantes de gimnasios se manifestaron en la Plaza de Armas frente a Palacio de Gobierno en petición para que sean considerados en la primera fase de apertura de negocios en el estado, como parte de la estrategia ante el Covid-19. Susana Rodríguez, representante de una asociación de Gimnasios en San Luis Potosí, indicó que son cerca de 250 gimnasios en la zona metropolitana y más de 600 personas dedicadas a dar clases de diferentes disciplinas. Si bien no estimó la pérdida que han tenido los gimnasios, señaló que en un gimnasio chico se tienen cerca de 70 socios, con mensualidades de 350 pesos, que significarían 24 mil 500 pesos de ingresos; además de otros productos como botellas de agua, alimento o suplementos y proteínas; mientras para gimnasios más grandes, los ingresos son mucho mayores. Señaló que incluso se ha recurrido a pagar a sus trabajadores solo el 60 por ciento de su salario. “Es muy desgastante y preocupante que no nos toman en cuenta para que nosotros regresemos en la primera fase. Ya lo veíamos venir desde que empezó que nos iban a dejar hasta el último”, reprochó. “No es posible que abran primero los teatros y las iglesias que nosotros que somos gimnasios, que dependen muchas personas de nosotros e incluso tienen hijos”, añadió Susana. Recordó que los gimnasios han permanecido cerrados desde el pasado 23 de marzo.  “También nosotros queremos la oportunidad, ¿Por qué si otros negocios abren, por qué nosotros no si hemos hecho y seguimos perfeccionando con los demás gimnasios una lista, un protocolo para que podamos darle la seguridad a los socios y trabajadores de que pueden venir a un lugar seguro?”, cuestionó. Sobre clases en línea, Susana Rodríguez se pronunció en desacuerdo. “Nos sugirieron hacerlo en línea, soy de la idea de lo que es tangible, no estoy tan de acuerdo en las clases en línea, pero pienso que no estamos tan preparados para hacer una clase en línea”.