WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el pasado viernes una propuesta provisional de presupuesto con el fin de evitar una parálisis del gobierno y mantenerlo funcionando durante dos semanas, hasta el 22 de diciembre. El mandatario promulgó la iniciativa en la Casa Blanca después de que la Cámara de Representantes y el Senado actuaron para redactarla y evitar el llamado "government shutdown" o cierre del gobierno este fin de semana. La Casa Blanca y los líderes del Congreso, mientras tanto, seguirán negociando un acuerdo de más largo plazo. La medida provisional financia todo tipo de agencias gubernamentales, desde el Departamento de Defensa hasta el Servicio Interno de Impuestos del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (IRS por sus siglas en inglés). También pone dinero a disposición de varios estados que se están quedando sin fondos para el programa de seguro médico para niños, el cual provee atención médica a más de 8 millones de niños. La Casa Blanca y los legisladores dicen que el proyecto de ley provisional les dará más tiempo para negociar varios temas de la agenda de fin de año, incluso el presupuesto, un programa de salud infantil y ayuda en caso de huracanes. El jueves, el Congreso aprobó la propuesta provisional para así ganar tiempo para las complicadas negociaciones sobre una amplia gama de temas en el Capitolio. La parálisis gubernamental pudo evitarse luego de que todos los involucrados expresaran posturas optimistas durante una reunión vespertina en la Casa Blanca entre los líderes del Congreso y Trump. La medida fue aprobada en la Cámara de Representantes con una votación de 235-193, básicamente apegándose a las líneas partidistas y no tuvo problemas en el Senado, donde recibió una aprobación de 81-14 apenas una hora más tarde. La propuesta mantendría al gobierno operando normalmente hasta el 22 de diciembre, cuando podría haber otro problema de cierre y más complicado. Los temas analizados durante la sesión en la Casa Blanca incluyeron el descarte de un congelamiento de fondos al Pentágono y otras agencias locales, la extensión de un importante programa de salud infantil y la ayuda para la reconstrucción en Puerto Rico, Texas y Florida por la devastación que dejaron varios huracanes. El asunto más controvertido y de alta prioridad para los demócratas, involucra las protecciones a los inmigrantes traídos ilegalmente al país durante su infancia o “dreamers”. En comunicados consecutivos, demócratas y republicanos declararon que el encuentro fue productivo mientras que la Casa Blanca lo definió como constructivo. Ya en privado, asesores del Congreso dijeron que no se lograron grandes avances. -- EXCÉLSIOR