CIUDAD DE MÉXICO.- Escritor, compositor, músico y cineasta, Armando Vega Gil fue bajista fundador de Botellita de Jerez, situada entre las bandas más destacadas e influyentes del rock nacional en las últimas tres décadas. Nació en la Ciudad de México en 1955 y falleció aquí mismo el pasado lunes. El músico fue víctima del linchamiento mediático tras se acusado en redes a través del movimiento #MeTooMusicosMexicanos de acosar y abusar de una niña de 13 años. La madrugada del lunes el músico anunció su suicidio en Twitter y en una carta pidió que no se le acusara a nadie de su decisión y dejó claro que su muerte 'no es una confesión de culpabilidad, todo lo contrario, es una radical declaración de inocencia'. Hace un par de años su vida era completamente diferente a la que vivía a últimos días. El 31 de mayo del 2017 el músico dio una entrevista al programa Caldo de Cultivo de Excelsior Televisión conducido por Mariana H. "Ahorita estoy en un lugar que agradezco, fuimos subiendo y México nos recibió y nos puso en un lugar muy importante", dijo.

Al ser cuestionado sobre qué tan difícil fue abrirse paso en un México de pensamiento 'cerrado' contestó lo siguiente: Lo naco es chido y siempre defenderemos eso, cuando nosotros lo asumimos era un momento de crisis y vimos con nuestra música y letras una posibilidad de acercarnos a las masas, pero nos costó muy caro, fue una osadía. Fue peligroso incursionar en otros ritmos pero abrimos paso a las generaciones futuras, ahorita ya cambiar de género es algo normal". Curiosamente en la entrevista se tocó el tema de la denuncia ciudadana y la violencia que se vive a últimos tiempos. "Al principio muchos salen a las marchas por una causa pero de pronto la lucha se volatiza, el problema no está en la debilidad o en la capacidad de organización, lo que pasa es que faltan plataformas que apoyen las ideas", aseguró.

El músico mencionó el caso de Tamara de Anda, mejor conocida como Plaqueta, quien fue criticada por denunciar en redes el acoso que vivió cuando un taxista le gritó 'Guapa' en la calle.  Por ejemplo, lo que hizo plaqueta (denunciar) a muchos les pareció una tontería, a mi me parece muy bueno, es un primer paso muy importante, se puede, hay opciones, hay derechos, si los ejerces o no ya es un rollo de voluntad". Para finalizar habló de su faceta como escritor, "Renata y la fábrica de juguetes”, “Picnic en la fosa común”, “Momias, ángeles y espantos”, “Virgen de medianoche”, “Genoveva y el misterio de las vacas”, “La ventana y el umbral”, “El ritual del lagarto” y “Rockboy y la rebelión de las chicas” son algunos libros que Vega Gil dejó en su legado. Yo estoy muy contento con mi trabajo. En especial con mi libro 'La música de las esferas', es muy personal, hablo de todo lo que es importante para mi y lo que me ha llevado a ser quien soy".

Escribir y cantar para niños surgió después de convertirse en papá. "Vivir el proceso de crecimiento de un chamaco es muy loco, maravilloso. Uno no tiene los hijos porque los quiera, sino porque los necesita".

-- EXCÉLSIOR