Vínculo copiado
Habrá bandera negra, que aconsejará posponer o cancelar una prueba
14:22 martes 24 septiembre, 2019
Deporte Nacional e InternacionalCuando el Termómetro de Globo de Bulbo Húmedo (Wet Bulb Globe Termomether, WBGT) marque 28ºC en Doha durante los Mundiales de atletismo, del 26 de septiembre al 6 de octubre, una bandera negra aconsejará posponer o cancelar la prueba, de acuerdo con el código de la Federación Internacional (IAAF), pero será una recomendación de los médicos que el director de competición, en posesión de la última palabra, habrá de gestionar. La temperatura medida con el WBGT no es la que registran los termómetros callejeros, sino una relación entre la humedad, la temperatura ambiente y la velocidad del aire, en ausencia de radiación solar. Rumores alarmistas no dejan de propalarse a medida que se acerca el comienzo de los campeonatos. Se habla de una posible suspensión del maratón femenino, previsto para el viernes a las 23:59 hora local, y de los 50 km marcha (sábado a las 23:30 hora local), pero el desmentido es tajante: "La IAAF no considera posponer o cancelar ningún evento en ruta en el Campeonato del Mundo de Atletismo de Doha 2019. Hay planes de contingencia para todos los escenarios posibles, pero ninguno se activó". Las previsiones meteorológicas prevén para la hora del comienzo del maratón femenino una temperatura ambiente de 30 grados y un 64 por ciento de humedad, con vientos que soplarán a una velocidad de entre 7 y 15 km/hora. Para los 50 km marcha, el sábado, el calor sube un grado y se mantiene la humedad. El peligro de cancelación es real. La combinación de calor y humedad en que habrán de competir los atletas en la capital qatarí, encendió todas las alarmas y los equipos, preocupados por la salud de sus miembros, tuvieron que ingeniárselas para combatir la amenaza. En sus 16 ediciones anteriores, los campeonatos del mundo de atletismo nunca habían terminado después del 6 de septiembre. La decimoséptima convocatoria, sin embargo, entrará de lleno en el mes de octubre, para minimizar los riesgos.Muchos recuerdan con horror el calor húmedo asfixiante de Osaka en los Mundiales de 2007, y sin embargo en la ciudad japonesa no se alcanzó ese nivel fatídico de 28ºC medidos con el WBGT. Los responsables qataríes han tenido que trabajar a fondo para remodelar el estadio Khalifa, totalmente cubierto, y dotarlo, mediante grandes toberas, de un sistema de aire acondicionado que permitirá mantener la temperatura en torno a los 25 grados, aun cuando fuera del recinto el termómetro marque 40. Pero la refrigeración del estadio no reportará ningún consuelo a quienes han de competir fuera del recinto: maratonistas y marchadores, que, pese al horario nocturno de esas pruebas, habrán de competir con temperaturas por encima de los 30 grados y una humedad superior al 50 por ciento. Los 28º C medidos con el WBGT dan una medida exacta y fiable del índice de peligro para el atleta, declaró el doctor Christophe Ramírez, jefe de los servicios médicos de la Federación Española de Atletismo.
A su juicio, el calor y la humedad de Doha, incluso en fechas tan tardías del año, pueden ser peligrosos para la salud de los deportistas, sobre todo para los que compitan durante más de 30 minutos, es decir, en 10 mil metros, maratón y marcha. Curiosamente, el calor no perjudica, sino al contrario, a los especialistas en pruebas explosivas, esfuerzos de hasta 30 segundos, es decir, carreras de 100 y 200 y concursos de saltos y lanzamientos. En carreras comprendidas entre los 400 y los 5.000 metros no se han demostrado beneficios ni peligros por el calor y la humedad. Para minimizar riesgos los atletas han participado en planes de aclimatación, realizando entrenamientos intensos en condiciones de calor y alta humedad. Algunos lo han hecho en la propia Doha, otros en Japón, que el año próximo acogerá los Juegos Olímpicos en parecidas -o incluso peores- condiciones climáticas; otros en zonas especialmente cálidas y húmedas de sus propios países.
--
Excelsior