“Vamos a observar donde se tenga que observar y no ser omisos, sin embargo, no se llevará a cabo una política pública de persecución”. Bandera de cordialidad y transición que enarbola Guadalupe Torres Sánchez, nombrado como Secretario General de Gobierno para la administración que presidirá Ricardo Gallardo ya en menos de dos meses. Y ese ha sido su tenor. Tender los caminos y puentes con diferentes sectores de la vida publica y social de San Luis, del San Luis que todos queremos. Los procedimientos de entrega-recepción ya empezaron, tanto los públicos y privados y cafeteros. Y es hoy al mediodía cuando se formaliza la entrega carrerista. Jorge Castillo Ramírez, fungirá como secretario de actas; Francisco Elizondo Garrido, área de finanzas; el exoficial Mayor de Soledad de Graciano Sánchez, Noé Lara Henríquez, José Luz Huerta Esparza y Guadalupe Torres Sánchez, ya multicitado. Todos ellos de absoluta confianza de Ricardo Gallardo. Y no es para menos.  El tema financiero, sanitario y administrativo pende de alfileres tan delgados como la línea que es diferencia entre la cordialidad y buen camino o el señalamiento flamígero a lo mal hecho y las consecuencias jurídicas que puedan darse. Desgastes políticos y legales que pocas administraciones quieren y menos las salientes desean. O barren y trapean como debe ser, o la barredora y camión recolector harán mas ruido que el de una escoba de pelos suaves, con las que las anteriores administraciones -priistas y panistas- estaban acostumbrados a hacer limpieza, al fin de que “ya nos conocemos las mañas”. Ahora no. Será muy distinto. Hasta mañana…