Gracias a las atajadas de Pedro Gallese y a un gol de Carlos Esquivel, los Tiburones Rojos de Veracruz se metieron a la casa de los Gallos de Querétaro y se llevaron el triunfo de 1-0, el cual es oxígeno puro en la lucha por la permanencia. Fueron los escualos los que dejaron claro que iban por puntos y por eso tuvieron llegadas constantes como el remate con la cabeza de Diego Chávez en el primer tiempo o el disparo de Wilder Cartagena al 48’, solo que en ambos casos intervino el arquero Volpi. Y para lograr derrotar al arquero brasileño tuvieron que recurrir a una gran jugada que inició Carlos Esquivel y que el Keko Villalva devolvió de tacón en el área para que el exjugador del Toluca rematara con pierna derecha para el 1-0 a los 27 minutos.

Las atajadas del peruano Gallese llegaron a los 28 minutos tras un remate de Candelo con la cabeza y luego al 45’ a disparo de Sanvezzo que estaba solo ante el arquero que se lanzó abajo para desviar la pelota. La polémica del encuentro se dio a los 67 minutos en un contragolpe de los Gallos cuando de nuevo apareció Candelo dentro del área y tras un recorte mandó un disparo que fue tapado por el peruano Christian Ramos con la mano. El árbitro Fernando Guerrero se dio cuenta de la jugada pero de inmediato descartó que hubiera penal y dejó seguir la jugada pese a los reclamos de los jugadores emplumados. Los escualos sufrieron la baja por lesión de Miguel Murillo, quien se tropezó con una manta de publicidad fuera del campo por lo que fue trasladado en ambulancia a un hospital para hacerle estudios. El jugador se dolía de un costado. Con este resultado, Veracruz llegó a 93 puntos por 100 de los Gallos en la tabla de cocientes.

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Mediotiempo