Al minuto dos Gabriel Jesús hizo estallar el Etihad Stadium y puso a soñar con una remontada histórica a la afición del Manchester City, que mantuvo la ilusión de meterse a las semifinales de Champions League durante los siguientes 54 minutos. Sin embargo, la estrella y sensación egipcia de la temporada, Mohamed Salah, fulminó las esperanzas del equipo inglés, y comenzó a finiquitar la obra que el Liverpool inició la semana pasada en Anfield, para proclamarse como el primer semifinalista de la Champions League 2018. En los primeros minutos el equipo dirigido por Pep Guardiola le metió suspenso al partido de vuelta, que para muchos estaba más que terminado por el 3-0 a favor con el que llegaron los Reds. Con el equipo tirado al frente desde el inicio, el City consiguió el 1-0 al minuto 2. Todo se alineaba para poder emparejar el marcador global. Pero el Liverpool nunca cayó en desesperación, defendió su ventaja, mantuvo la calma y poco a poco le fue bajando las revoluciones al cuadro local.

Con el 1-0 se fueron al descanso. El Manchester intentó mantener el dominio de la pelota y lo logró, pero no pudo reflejar ese dominio en jugadas claras de gol. Entonces, en uno de los dos descuidos que tuvo la defensa local, apareció el artillero egipcio Mohamed Salah para concluir un latigazo iniciado por él y Sadio Mané al minuto 56. El gol aplastó todas las aspiraciones del City, que con todo y la loza encima todavía buscó un tanto que lo despertara.

En el segundo error de la zaga blanquiazul, Roberto Firmino le puso el último clavo a la cruz del Manchester City. Nicolás Otamendí falló en una salida por la banda de la derecha, el jugador brasileño robo la pelota, la condujo hasta el área y con un disparo cruzado puso el 1-2 en el electrónico y selló el boleto del Liverpool a las semifinales del torneo. 

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Mediotiempo