El Instituto Belisario Domínguez (IBD), del Senado de la República, realizó una investigación sobre los beneficios que tendría la aplicación de impuestos ambientales para disminuir la contaminación del país, además de convertirse en una herramienta fiscal que beneficiaría al medio ambiente. El estudio se llama “Impuestos ambientales en México y experiencias internacionales”, elaborado por el investigador Javier Galán Figueroa, explica que este tipo de impuestos, además de recaudar ingresos públicos, permitirán al gobierno crear conciencia entre la población sobre los efectos adversos del cambio climático y, de esta manera, se integre para revertir el desgaste y la contaminación ambiental. La investigación señala que, entre los instrumentos económicos para enfrentar los efectos de la contaminación y el cambio climático, los impuestos ambientales son eficientes, dinámicos y flexibles pues se encuentran sustentados en incentivos a través del sistema de precios de mercado. La OCDE menciona que la aplicación de este tipo de impuestos trae consigo estos beneficios: Las autoridades podrán disminuir las emisiones contaminantes incentivando la eficiencia energética reduciendo los componentes contaminantes en el proceso productivo mediante la incorporación de tecnologías limpias. Si los impuestos están 24 correctamente diseñados y se cumple el criterio de la credibilidad, se creará un círculo virtuoso a favor del medio ambiente. Los impuestos serán altamente transparentes a fin que la sociedad tenga claro cuáles son las actividades y las fuentes contaminantes que se encuentran gravadas, así como informar sobre el uso de los recursos recaudados por la reforma fiscal ambiental

La incorporación de tecnologías limpias permiten reducir el costo social de los impuestos ambientales --

Con información de Dinero en Imagen

Foto: Pixabay