Si pensabas que había llegado el momento de parar el goce con los alimentos navideños, debes tener en cuenta que aún falta la tradicional Rosca de Reyes para cerrar con broche de oro. Pero calma, antes de que comiences a pensar en el propósito de bajar de peso, déjanos comentarte las razones por las que debes comerte al menos una rebanadita… Cada 6 de enero se celebra la llegada de los reyes magos, quienes entregaron 3 regalos (oro, incienso y mirra) al mesías recién nacido, Jesús de Nazareth y como parte de la tradición, comemos rosca acompañada por una taza de chocolate caliente. En esta tradición, se cree que los feligreses elaboraban un pan endulzado con miel y decorado con frutos del desierto como higos, dátiles y nueces, aunque también existe la creencia de que todo fue idea de los franceses, quienes escondieron un frijol en su interior. Sea como sea la historia, la rosca como la conocemos llegó a México a través de la ocupación española durante el proceso de evangelización. De hecho, la forma que tienen sus ingredientes y cómo está elaborada, tienen diversos significados religiosos; su forma original era circular aunque ahora se elabora en forma de elipse y ésta recuerda a los feligreses que Dios y su amor es infinito.  El niño oculto en el pan, ya sea de cerámica o de plástico, representa cuando José y la Virgen María escondieron al Niño Jesús del Rey Herodes, quien se sintió amenazado por la llegada del Rey de los Judíos y tenía intenciones de aniquilarlo. Un ángel previno a los magos de volver por otro camino y la Sagrada Familia logró escapar sana y salva a Egipto. Y Finalmente, los frutos secos, los cuales figuran las joyas de las coronas de los tres reyes magos. La tradición también indica que aquella persona en sacar el muñequito en su rebanada (representación del niño Dios), tendrá que pagar los tamales el Día de la Candelaria (2 de febrero). Ahora que ya sabes todos los antecedentes de la rosca, es importante destacar que su consumo moderado, trae beneficios a tu salud: Para empezar, la harina de trigo ayuda a combatir las carencias nutricionales alrededor del mundo; y en México, está fortificada con los siguientes nutrientes: hierro, ácido fólico, zinc, tiamina, riboflavina y niacina, por lo que previene la anemia. El higo es rico en antioxidantes y fibra, y es utilizada dentro la medicina tradicional para el tratamiento de problemas gástricos, cáncer, enfermedades respiratorias, inflamación, hipoglicemia e infecciones microbianas, así como el ate, el cual viene de Europa del Este y Oriente Medio, y estimula la circulación, fortalece el sistema inmune y promueve la salud digestiva. Pero eso no es todo, el huevo es una fuente rica de proteína animal, así como de valiosos nutrientes como colina, vitamina B7 (biotina), vitamina D, vitamina B12 (ácido fólico), selenio y ácidos grasos Omegas. --

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